El ritual tequilero de las Chivas del Guadalajara

Hoy en día, los jugadores profesionales de fútbol deben seguir dietas súper estrictas para asegurar que están en óptima condición física cuando entran al terreno de juego, pero esto no siempre ha sido así. A mitad del siglo XX en México —mucho antes de que la nutrición deportiva fuera algo importante– las estrellas de las Chivas de Guadalajara,uno de los equipos de futbol más populares del país, tenía una manera muy diferente de prepararse para cada juego: animarse con tequila.

El equipo de las Chivas de esta época es considerado como el mejor de la historia de México. Conocido como el "Campeonísimo", ganó 15 trofeos, incluyendo siete títulos de liga mexicana, en ocho años —desde 1957 a 1965—. Pero, ¿era la preparación para el juego el secreto de su éxito?

Cuco, un anciano mesero de la cantina Los Famosos Equipales en el centro de Guadalajara, me cuenta que los jugadores solían venir para refrescarse en la mañana de cada juego. "Venían a las 11 AM y tomaban uno o dos tragos de tequila y luego se iban a jugar a las 11:30", dice. "Era una tradición que tenían para empezar el juego sintiéndose felices".

Desde que fue fundada, Los Famosos Equipales ha atendido a quienes tengan afición por tomar tequila temprano en las mañanas. "El bar empezó en 1920 como una tiendita a donde la gente iba a pedir tequila", Cuco me cuenta. "Aparecían en sus caballos y decían: Dame un trago. Se lo tomaban y se iban a trabajar".

La cantina toma su nombre de los equipales —sillas tradicionales hechas de madera y cuero del pueblo vecino de Zacoalco de Torres— que los dueños de la tienda colocaron para que sus clientes pudieran sentarse. Los lugareños a menudo decían, "Vamos por un tequila al lugar de los equipales", y así la tienda se hizo conocida como Los Famosos Equipales.

Mientras se hacía más popular, los dueños consiguieron una propiedad más grande. Con sus puertas, sus ventanas con barrotes y pintura blanca descascarada, el exterior de la cantina no se vería fuera de lugar en un set de filmación para una película del viejo Oeste. Dentro, dos hileras de columnas de piedra arqueadas en el techo. Las paredes están repletas de recuerdos enmarcados de las Chivas y fotos en sepia de toreros locales y héroes boxeadores. Una rockola suena con música de banda y hay una cabeza de toro colgada en la pared con un puro desenfadado pendiendo de su boca.

Cuco señala un refrigerador antiguo de madera detrás de la barra. "Este refrigerador tiene casi 70 años. Creo que es el último refrigerador de madera en Guadalajara, pero ya no funciona así que lo usamos para almacenar". Luego señala las mesas cuadradas de metal. "No tienen números; cada mesa tiene su propio nombre: Pepsi, casa, radio, patio, motor —dependiendo del objeto que esté cerca de ellas", explica. "Los meseros nuevos tienen que aprenderse los nombres de memoria".

Respetada por el aburguesamiento, Los Famosos Equipales sigue siendo un lugar barato para emborracharse. Una botella de cerveza cuesta $25 pesos (cerca de $1.50 de dólar) mientras que un generoso shot de tequila va desde $50 hasta $110 pesos ($3 a $6 dólares), dependiendo de la marca.

La bebida más popular, dice Cuco, es el coctel legendario de la casa: "Nalgas Alegres", que cuesta solo $50 pesos. Inventado hace casi 40 años, consiste de ginebra, ron, vino tinto, refresco Orange Crush y jugo de lima. Cuco me sirve uno con un plato de mini tortillas con arroz y guacamole, y un bol de pepino con jugo de limón y Tajín. El coctel sabe mucho mejor de lo que suena, aunque es difícil decir si mis nalgas se sienten más felices.

Como en muchas cantinas clásicas, los meseros de Los Famosos Equipales traen botana gratis con cada ronda de tragos, incluyendo jícama picada, cacahuates, palomitas, tostadas con queso rallado e incluso sopas y chiles rellenos. También ofrecen platos de chicharrón, cecina, salchichas con queso panela y tostadas con piel de cerdo, pierna o pata, desde $20 hasta $60 pesos por orden.

En cuanto a las Chivas, Cuco sigue siendo fan de corazón, pero admite que los mejores días del equipo ya han pasado hace mucho y se lamenta de que el bar no se llene como solía hacerlo cuando hay un importante partido en la TV. Los peores enemigos de las Chivas, el América, los han superado como el equipo más exitoso de México en años recientes, mientras que las Chivas han ganado únicamente un título de liga desde que Jorge Vergara compró la franquicia en 2002.

Desesperado por restablecer sus días de gloria, Vergara ha cambiado director técnico 21 veces en 14 años, construyó un nuevo estadio impecable e incluso llevó a sus jugadores a un retiro espiritual con la esperanza de que un chamán pudiera ayudarlos a redescubrir su talento colectivo. Pero nada le ha traído el éxito duradero que desea.

Quizá debería intentar llevar a sus jugadores de regreso a la cantina por un shot de tequila antes de cada partido.

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