Los guerreros de Smokey Mountain

FYI.

This story is over 5 years old.

Viajes

Los guerreros de Smokey Mountain

Una de las comunidades más pobres de Tondo, en Filipinas, sobrevive del carbón. La mitad de los trabajadores son niños menores de 17 años.

En enero, el fotógrafo español Manu Mart visitó las Filipinas para tomar imágenes del tifón que ocurrió allí. Ahí encontró la comunidad de Smokey Mountain, ubicada en Tondo, una de las regiones más pobres de Manila. Las familias y niños que habitan en el lugar escarban en la basura y hacen su vida de desechos de cables y metales. El mayor ingreso de la zona es obtenido de la producción de carbón vegetal que se quema en hornos al aire libre. El 50 por ciento de los trabajadores de las minas, son niños menores de 17 años.

Publicidad

Debido a los bajos estándares de vivienda, el trabajo infantil, la pobreza y los problemas de salubridad, la esperanza de vida en la comunidad es de 40 años. Mart está utilizando las fotografías para promover un proyecto con la ONG ALIVE, que trabaja en la protección de niños que son propensos a trabajar en las minas carboneras.

VICE: ¿Cómo te enteraste de Smokey Mountain?

Manu Mart: Conocí al encargado de una ONG en Mountain llamada Malaya Kids Ministries. Le conté que era fotógrafo y le gustó la idea de hacer un proyecto ahí. Viví cerca, en una iglesia de la ONG y dormí ahí con algunos niños huérfanos que trabajan en las minas de carbón; ellos toman turnos y, algunos días, duermen en la iglesia.

¿Cuáles fueron los principales problemas que encontraste en la comunidad?

Todo. La situación allá es tan difícil y complicada que, cuando empecé a trabajar, no sabía en qué enfocarme, porque todo era inspirador. Poco a poco noté el grupo que sufría las peores condiciones: los niños y jóvenes.

¿Cuántas horas laborales hacen los niños?

Aproximadamente unas 13 o 14 por día. No les pagan; su trabajo es escarbar en las sobras de madera o metal, para encontrar cables o tornillos que puedan vender. Viven de lo que encuentran.

Parece una situación inevitable. 

Depende de las familias. Algunas han instaurado sus propias tiendas de negocio en Smokey Mountain, así que éstas, poco a poco, han logrado salirse de la producción de carbón. Pero, hay niños que no tienen familia y viven en las minas, durmiendo cerca a los hornos de carbón.

Publicidad

Los niños de tu proyecto no se ven tristes. ¿Cómo es su actitud?

Son niños. Es su realidad. Yo nunca he escuchado a alguno decir que no quiere estar allá. Los niños viven su realidad y sacan lo mejor de ella, aunque sean las peores situaciones.

¿Qué problemas de salud traen las minas de carbón a las personas?

Toda clase de enfermedades: tuberculosis, hepatitis B, problemas respiratorios, y todo lo que puedas obtener de respirar humo de carbón mientras está siendo quemado constantemente. Las consecuencias a largo plazo son fatales.

Cuéntanos sobre el proyecto ALIVE.

Es un proyecto creado por Malaya Kids que busca apoyar a estas familias, dándoles una alternativa en sus estilos de vida para que monten sus propios negocios y se salgan de la producción de carbón. También, el objetivo es hacer que los niños vayan al colegio, así que si no logran sacarlos de las minas, al menos trabajan menos horas.

¿Cómo reaccionan los locales frente a los niños que escarban en las basuras? ¿Son compasivos o crueles?

Bueno, Smokey está en la mitad de varios suburbios. La vida en Tonto es muy difícil, así que la comunidad no está por encima de Smokey Mountain. Nadie es compasivo o cruel, todos están en la misma condición de pobreza y están viviendo la misma realidad que los vecinos.

En el fotoperiodismo siempre existe este debate sobre los límites al fotografiar la pobreza. Algunas veces parece que se hace más por fines comerciales que por cambiar una situación.

Publicidad

Mientras que estén reporteando y haciendo que las personas vean el problema, está bien. Fotografiar la pobreza para sacar provecho de ésta, no debería hacerse nunca. Como fotógrafos, estamos acá para contar historias que están pasando en todos los rincones del mundo. El verdadero problema de fotografiar la pobreza es hacerlo en sí, porque, debido a que es fácil encontrarla y  acceder a ella, tú te pones un rango más alto estando dentro de la situación.

¿Qué es lo más triste que viste?

Es difícil de decir, pero fotografíar a Smokey Mountain no fue una experiencia triste. Siempre tuve en mente que ésa era su realidad, claro que es injusta, pero existe. Si dejas que esos sentimientos tristes te afecten, entonces, es muy difícil hacer un proyecto fotográfico a partir de esto.

¿La desigualdad no te emputó?

Claro. El problema es que es algo que se presenta en todas partes del mundo. No puedes luchar contra ella, pero como fotógrafo puedes contar historias y reportearlas.

Puedes ver más del proyecto de Manu Mart, acá.
Sigue a Laura en Twitter.

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart

Photo: Manu Mart