La foto es de Julian Morgans.Pasas una noche horrible en una silla incómoda de urgencias, te sientes fatal, te duele todo, quieres salir rápido de ahí, ir por los medicamentos que te recetaron y acostarte en tu casa a morir. Pero para eso primero hay que pasar por otro consultorio, el de un médico, que debe confirmar tu diagnóstico y firmar la hoja con la receta. Ese trámite desbloquea el siguiente. Y crees que va a ser rápido, que es asunto de una firma, pero te encuentras de la nada con una situación absurda, increíble, que te hace pensar que sigues enfermo, que estás delirando.Esta semana, en su muro de Facebook, una mujer española llamada Patricia contó la siguiente historia:Por los nervios se había desmayado la noche anterior, y había ido al hospital Reina Sofía, en Murcia, España, para que la atendieran de urgencias. "El trato fue excelente pero esta mañana al ir a mi médico de cabecera me he encontrado con un indeseable", escribe. El médico, que la atendía por primera vez, arrancó ofreciéndole un cigarrillo y prendiendo uno sin reparo de su paciente.Patricia dice que le explicó lo que le habían diagnosticado anteriormente en el hospital y que él le respondió que "no me iba a recetar lo que me habían mandado en urgencias porque me iba a poner gorda y ahora mismo tenía un tipazo". O sea: es mejor que siga estando buena a que se mejore.
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El médico no paró ahí y arrancó a hacerle preguntas que no iban al caso, sobre ella y sobre su familia. Que quién estaba más buena, si su madre o ella. Según él, bajo el pretexto de saber si su desmayo había sido por problemas domésticos. "Os juro que mi mente estaba rota y yo no sabía si lo que me estaba diciendo era de verdad", sigue en su publicación.Y todavía faltaba más."El colmo de los colmos es que ha realizado un diagnóstico y su conclusión a mi problema es que estoy mal follada, y que si no era mal follada era mi madre", dice, y adjunta una foto donde, con la popular letra casi ilegible de un médico, se alcanza a descifrar una línea que dice "no bien follada".
La mujer cuenta que salió desubicada, confundida, y decidió compartir su experiencia en redes sociales. Allí, además de solidaridad, otras mujeres le respondieron diciendo que habían sufrido experiencias similares. Una comentó que "no es la primera vez que escucho comentarios de este tipo sobre este 'hombre', y por lo que sé es habitual que sus diagnósticos sean de tipo sexual".
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Al día siguiente, Patricia también hizo la denuncia ante las instituciones competentes. Según La Opinión de Murcia, la Consejería de Sanidad de esa ciudad ha abierto una investigación contra el médico y lo ha llamado a declarar esta mañana. También ha llamado a declarar a la denunciante."Si se confirman los hechos podría ser sancionado gravemente e incluso perder su puesto", dijo una fuente de la Consejería de Sanidad a la cadena española Ser. Sin embargo, aclaró que es momento de escuchar la versión del médico.Al acusado le quedan dos salidas: negarlo todo o tratar de defender que la falta de sexo es un problema médico.Por otro lado, y más allá de que el médico haya o no sido irresponsable, sí se ha demostrado que tener sexo es bueno para la salud y ayuda a resolver otros problemas. Por ejemplo: un estudio del departamento de Psicología de la Universidad George Manson concluyó que tener sexo podría ayudar a reducir los síntomas de ansiedad. Otro estudio de la Universidad de Montreal probó que una rutina de sexo podría servir de ejercicio cardiovascular. De hecho, Internet está plagado de páginas que pregonan "los beneficios de tener buen sexo": regular la presión sanguínea, quemar calorías o hasta reducir el riesgo de ataques cardiacos.Tener sexo es bueno para mente y cuerpo. ¿El médico lo es?
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El médico no paró ahí y arrancó a hacerle preguntas que no iban al caso, sobre ella y sobre su familia. Que quién estaba más buena, si su madre o ella. Según él, bajo el pretexto de saber si su desmayo había sido por problemas domésticos. "Os juro que mi mente estaba rota y yo no sabía si lo que me estaba diciendo era de verdad", sigue en su publicación.Y todavía faltaba más."El colmo de los colmos es que ha realizado un diagnóstico y su conclusión a mi problema es que estoy mal follada, y que si no era mal follada era mi madre", dice, y adjunta una foto donde, con la popular letra casi ilegible de un médico, se alcanza a descifrar una línea que dice "no bien follada".
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Al día siguiente, Patricia también hizo la denuncia ante las instituciones competentes. Según La Opinión de Murcia, la Consejería de Sanidad de esa ciudad ha abierto una investigación contra el médico y lo ha llamado a declarar esta mañana. También ha llamado a declarar a la denunciante."Si se confirman los hechos podría ser sancionado gravemente e incluso perder su puesto", dijo una fuente de la Consejería de Sanidad a la cadena española Ser. Sin embargo, aclaró que es momento de escuchar la versión del médico.Al acusado le quedan dos salidas: negarlo todo o tratar de defender que la falta de sexo es un problema médico.Por otro lado, y más allá de que el médico haya o no sido irresponsable, sí se ha demostrado que tener sexo es bueno para la salud y ayuda a resolver otros problemas. Por ejemplo: un estudio del departamento de Psicología de la Universidad George Manson concluyó que tener sexo podría ayudar a reducir los síntomas de ansiedad. Otro estudio de la Universidad de Montreal probó que una rutina de sexo podría servir de ejercicio cardiovascular. De hecho, Internet está plagado de páginas que pregonan "los beneficios de tener buen sexo": regular la presión sanguínea, quemar calorías o hasta reducir el riesgo de ataques cardiacos.Tener sexo es bueno para mente y cuerpo. ¿El médico lo es?