Como ya se sabe, el 2016 ha sido un año terrible debido a la muerte de tantos iconos de la música. Durante cualquier otro año, la muerte de Britney Spears se hubiera visto como algo estrambótico (sobre todo porque Britney, obviamente, está hecha 100% de magia y no puede morir), pero en el espantoso 2016, donde nada parece ser sagrado, podría haber sido cierto.Es por eso que el hackeo de la cuenta global de Twitter de Sony Music—la cual fue tomada sin problema por el grupo de hackers Our Mine— puso al internet a temblar durante algunas horas. Fue el lunes, alrededor de las 9 am, que la cuenta publicó un tweet en el que se leía "Britney Spears murió en un accidente. Tendremos más detalles pronto #RIPBritney", antes de confirmar que en realidad estaba bien con un tweet que hacía referencia que la cuenta había sido hackeada. El grupo también tomó la cuenta oficial de Bob Dylan, desde donde tweetearon "descasa en paz, @britneyspears"— porque si por algo es conocido Dylan, es por su amor hacia Britney.Fuentes cercanas a Britney han confirmado que "está viva y en buen estado", sin embargo creemos que sería buena idea que para 2017 la envolvieran en plástico de burbujas y la metieran en un bunker bajo tierra. Solo para asegurarnos que se mantendrá a salvo.
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