¿Qué tan lejos llegará la inusual temporada de los Rangers?

Ha sido un año extraño para Cole Hamels, lo cual tiene sentido que esté por concluirlo con los Rangers de Texas, cuya temporada de ensueño ha sido la más rara en el béisbol. Después de una inesperada victoria en el Juego 1 frente a David Price y los colosos de Toronto, los Rangers tienen una ligera ventaja en el primero juego de postemporada de Hamels como abridor. El 1 de agosto, nada de esto habría tenido sentido, pero sí en octubre, gracias al reconocimiento de Hamels y a la forma en que los Rangers han jugado al final de la temporada.

Si pusiéramos un escenario donde los Blues Jays se llevaran la serie, realmente no sería mucho. Los juegos puede que tengan un marcador bajo, alto, que haya todo tipo de locuras, incluso una visita inesperada del Papa. Podrían ganar los dos primeros partidos o perder los primeros dos. De todos modos, todo favorecería a los Jays, quienes han pasado por encima de toda la liga.

La única manera (casi) para que Texas lograra ganar la serie sería seguir este guión:

Paso 1: David Price tiene un comienzo extraño en el Juego 1.

Paso 2: Algunos bateadores lesionados de los Blue Jays no le vendría nada mal a los Rangers.

Paso 3: Que a Cole Hamels no le conecten en el Juego 2.

Paso 4: De alguna forma, como sea, ganar un tercer juego.

Hasta aquí estamos dos a dos.

De alguna manera, los Jays perdieron el enfrentamiento de David Price versus Yovani Gallardo el jueves, similar a decir que un auto de F1 perdió una carrera frente a un bochito. Gallardo logró aguantar cinco entradas como un peleador que intenta llegar a la campana final. En este punto de la carrera de Gallardo, es lo mejor que le pudo haber pasado —una frase que podría repetirse hasta el cansancio para referirnos a los Rangers—. Un par de jugadores importantes de Toronto salieron del Juego 1 con lesiones, y aunque se reporta que Josh Donaldson y José Bautista están bien, nunca es grato que jugadores de este calibre se pierdan un juego de playoff.

Lo que significa que la temporada de los Rangers depende, hasta cierto punto, de que Cole Hamels saque la casta. Los Blue Jays eran los grandes favoritos de la serie antes de que arrancara; serán los favoritos en una serie de tres partidos, si es que logran controlar a Hamels.

Y aún así no todo depende de Hamels. La ofensiva de los Rangers ha sido menospreciada en el balance general de la serie. Texas fue capaz de sobreponerse a un pésimo mes de abril y, durante la segunda mitad de la temporada, se convirtieron en una de las mejores ofensivas de las mayores. De hecho, los Rangers anotaron la segunda marca más alta de carreras, 381, durante dicho período; el único equipo en anotar más fue Toronto con 405. La alineación utilizada para vencer a David Price estaba conformada por bateadores por encima del promedio. Una formación muy buena.

Así que los Rangers no están superados por completo por el equipo más talentoso de la Liga Americana. Ya han logrado hacer la parte más difícil al eliminar a Price, y aunque Hamels no es el mismo crack que era cuando lo compraron a mitad de temporada, sigue siendo el tipo de pitcher que todo equipo querría tener para abrir en una serie como esta. Lo ha logrado en el pasado y recientemente: en su último arranque, Hamels ponchó a ocho jugadores de los Angels para meterlos a los playoffs.

Fue una gran juego. Este es más importante. Matemáticamente, los Rangers aún pueden ganar la serie si perdieran el Juego 2, pero realísticamente es difícil ver cómo lo harían. La victoria de este jueves abrió el camino para que suceda. Si los Rangers ganaran la serie, si lograran hacer lo imposible, vencer al mejor equipo de béisbol en términos objetivos, tienen que ganar el siguiente juego. Ya lograron contrarrestar a David Price en Toronto. Ahora nos toca averiguar qué tan rara puede llegar a ser la temporada de los Rangers.