Lille Football Club
Marcelo Bielsa es el técnico de las anécdotas. En su trayectoria como director técnico, las experiencias se cuentan en infinidad de artículos y algunos libros que lo pintan inigualable por las peculiaridades de su personalidad, el minucioso estudio del juego y su intolerancia al espectáculo. Este fin de semana, ocurrió una de esas historias indispensables para relatar su estancia en el Lille de Francia: usaron tres arqueros en su partido ante el Estrasburgo.El ánimo del primer partido de visita estaba animado por una holgada victoria por 3-0 frente al Nantes en la jornada inaugural, pero hoy, la fortuna no estuvo de su lado. En el primer tiempo, Bielsa se vio obligado a gastar sus tres cambios. Apenas al 12', Thiago Mendes abandonó el campo por lesión, siete minutos más tarde, Kevin Malcuit se fue por circunstancias similares y para prevenir una expulsión, Ballo Touré volvió a la banca con una tarjeta amarilla encima. A pesar de las circunstancias de los siguientes 45 minutos, el "Loco" sostuvo en conferencia de prensa la necesidad de la tercera modificación.Bielsa se arriesgó y su arquero Mike Maignan lo hizo también al engancharse en una disputa que resultó en su expulsión por lanzar un balón a la nuca del mediocampista Benjamin Corgnet. Ya sin cambios y con media hora en el cronómetro, la expulsión lo obligó a ceder sus guantes al delantero Nicolas de Preville, el valiente que aceptó la responsabilidad que el "Loco" le ofreció también al otro atacante Yassine Benzia. Nicolás sobrevivió a un mano a mano con Idriss Saadi, pero la respuesta a la improvisación llegó diez minutos después con el gol de Jonas Martin.
Publicidad
A falta de recursos para recomponer el camino, Bielsa movió la pizarra de nuevo: "¡Esto es insólito, Amadou toma el puesto de De Préville en la portería!", informó la cuenta del club. El delantero volvió a la punta a buscar el empate y el defensa Ibrahim Amadou se paró bajo el marco. El movimiento no hizo diferencia. A diez del final, un penal que el arquero adivinó pero no pudo atajar y un gol desde fuera del área a la escuadra izquierda sentenciaron un partido inverosímil."No puedo aprobarlo, pero entiendo. Más que criticar, se trata de encontrar respuestas y correcciones a situaciones evitables", dijo Bielsa en conferencia sobre la expulsión por la imprudencia de Maignan, y fiel a su forma de ser, reconoció que esa ausencia no fue el motivo de la derrota.