El 15 de septiembre es una excusa para salir de fiesta, tomar y comer pozole. En esta ocasión la fiesta ocurrió a unas cuadras del zócalo y el pozole llego importado de San Francisco, y fue servido por Solar. Cerca de 3 horas recorriendo las fronteras del Acid, el Techno, el House y el Electro muy ortodoxo.Una noche muy grata y animada, todos traían ganas de fiesta, y fiesta fue lo que se les dio. Todos bailaron hasta que encendieron las luces (e incluso, después). Baile, baile, baile.
Al inscribirte en la newsletter de VICE, aceptas recibir comunicaciones electrónicas de VICE que en ocasiones pueden contener publicidad o contenido patrocinado.
