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Cultură

Jaime Martínez y las Ciencias sobrenaturales

Los protagonistas son el misterio, la ciencia ficción y mujeres en escenarios compuestos por diferentes profundidades y texturas.

¿Y si en el atardecer se encuentran dos soles? ¿Y si el cielo se mancha de tinta negra?  Aquellas cosas son posibles en el trabajo de Jaime Martínez, fotógrafo regiomontano que reparte su trabajo entre las imágenes de moda y las inscritas en el misterio y la ciencia ficción. Una selección de estas últimas puede verse en Ciencias sobrenaturales, que se presenta hasta el 16 de octubre en la Vice Gallery.

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Los protagonistas son el misterio, la ciencia ficción y mujeres en escenarios compuestos por diferentes profundidades y texturas. De espaldas entre la nieve, hincadas entre las hojas secas, con el cabello revuelto sobre el rostro, se esconden para invitar al público a participar más activamente. Aunque no hay teoría detrás de esos rostros escondidos, quizá vengan de haber crecido rodeado de mujeres o del mundo de fantasía que se creó de niño y adolescente por su timidez para acercarse a las chicas. Para Jaime, en sus fotos hay algo de intuición, experimentación y nostalgia.

Muchas de tus imágenes parecen de fantasía y sobreponen temas, ¿cuáles son tus puntos de partida?

Siempre fui influenciado por la ciencia ficción: comics, libros, películas clásicas, aunque fueran malas. En todas ellas siempre hay una chica en una situación especial, extraordinaria, sobrenatural. Igual cuando era adolescente tuve una época en un club de astronomía en Monterrey, de donde soy. Aprendí a adaptar mi réflex al telescopio y hacía fotos de la Luna y las estrellas. Salían bien malas (risas), no tenía mucha práctica, pero me emocionaba mucho.

¿Juegas, experimentas o cómo trabajas?

Primero tomo las fotos, pero cuando estoy editando me pongo a ver las imágenes y a fantasear, a experimentar, cambiar colores, brillos contrastes, veo otras imágenes y pienso en mezclarlas, hacer pegotes y empiezan a salir estas. Uso Photoshop desde por ahí de 1994. Casi siempre es experimentación.

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Cuéntanos la historia de la imagen donde hay un hogar en el vientre de una chica.

La chava de la foto es una exnovia. Estábamos una tarde en su casa experimentando con un proyector de fotos, viendo unas diapositivas que yo tenía. De repente ella se atravesó y sentí algo: le dije ponte así, quítate la camiseta… y ya empecé a apasionarme con el momento y la imagen. Experimentamos con poses, ropa y sin ropa, otras fotos y salió esta imagen.

¿En las imágenes se ve algo de nostalgia? ¿Es mi interpretación?

La nostalgia sí es un tema presente en toda mi foto. Cuando era adolescente y tuve por primera vez una cámara la vi como un objeto casi mágico para capturar momentos y conservarlos para siempre. Hay una foto de un árbol con la frase “We are home now”, es como si fuera un subtítulo de una película. Las frases de esa serie son todos partes de mensajes de texto que me enviaba con mi novia de entonces. Los guardaba todos y los anotaba en una libreta y al ponerlos en una foto le daba otro significado.

La foto capta un momento, pero el .gif capta algo más que eso, ¿qué significa para ti?

No sé si por inquieto, curioso o experimentar, nunca me quedo con la imagen tal cual. Siempre quise darle algo más, así empecé a hacer los fotomontajes. Pero esto de los .gifs, cuando descubrí la técnica como juego con otras fotos o películas, empecé a adaptarlo a las fotos y vi que me daba la posibilidad de alargar el momento y darle profundidad. Es alargar el momento, no a lo largo y ancho, sino en cuanto a tiempo. Se me hizo bien mágico. Es diferente de hacer un video porque ese tiene un principio y un final; el loop deja un momento desde fracciones de segundo hasta muchos de ellos repitiéndose. Es extender una imagen en la dimensión del tiempo.

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¿Cuál es tu relación con la tecnología?

A mí me gustan las imágenes. No me clavo en la manera como son hechas. Me gusta el resultado final. No me importa si fue hecha con la cámara más cara o la más barata. Tengo algunas fotos o .gif hechas con la cámara de mi celular que está medio chafa, pero es lo que a veces tengo a la mano. Después lo trabajo y me resulta una imagen que me hace sentir algo. No tiene que ser limitado por unas reglas.

¿Sientes que vives en la irrealidad de tus imágenes?

Sí, cuando siento eso y tengo una cámara empiezo a tomar fotos. Puede ser en cualquier momento. Una vez en Nueva York iba cruzando la calle una chava que llevaba como doce globos de gas flotando arriba de ella. Ahí estaba la imagen, sacas la cámara y tomas la foto. Se la tomé con el teléfono pero conservé el momento. Es cuando varias cosas se conjugan: ella cruzando la calle, la luz del momento, yo ahí. A veces las circunstancias, o el destino, como quieras llamarle, te ponen las imágenes.

Disfruta del último fin de semana de Ciencias Sobrenaturales en VICE Gallery. Abierto sábado y domingo, de 12-6pm. Entrada libre.