Fuera de uno que otro parpadeo, las modelos del video anterior no se mueven. Su callada tranquilidad es el contraste perfecto con sus vestidos, los cuales crujen misteriosamente como si un viento sutil soplara sobre ellos. Hechos de hilo fotoluminiscente y con un sistema de seguimiento óptico, estos vestidos se activan con la mirada humana. Entre más los miras, más se mueven y cambian.Inspirados en el ensayo de Paul Virilio Estética de la desaparición, los vestidos fueron creados por el diseñador Ying Gao y son parte de una nueva serie (No)where (Now)here que explora la idea de la ausencia. Los vestidos sólo se mueven cuando el espectador está presente. Nos enfrentamos a un nuevo tipo de moda: tecnología portable que exige no sólo un modelo sino también un público. Y un público sorprendido, sin duda, pues los vestidos de Gao parecen ir más allá de los posible.
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