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Analizamos las rastas de Keith Morris

Contenían uranio y arsénico

Dicen que los ojos son ventanas que dan al alma; en ese caso, ¿qué es el pelo? ¿El tejado? Al igual que el tejado, el pelo es importante, pero es algo por lo que en realidad casi nadie se preocupa más allá de su apariencia externa. Si no lo cuidas, se te enredará con porquería, pelotas de tenis y pájaros muertos. Fíjate en Keith Morris, vocalista original de Black Flag y líder de Circle Jerks y de los recientemente formados OFF! Keith se ha dejado crecer las rastas en una gran variedad de formas durante 23 años, y ahora tienen el aspecto de algo salido de una alcantarilla después de una tormenta especialmente fuerte.

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Esta es la razón por la que, tras reflexionar sobre la cornucopia de basura asquerosa que podríamos encontrar en el casco de queratina de Keith, les pedimos a él y a sus compañeros de OFF! (que, por supuesto, servirían como grupo de control) que nos enviaran al menos tres gramos de sus rastas. El plan era enviar las muestras a un laboratorio de Texas especializado en “Análisis Mineral del Cuero Cabelludo”. Este análisis del pelo, que no está precisamente reconocido desde el punto de vista médico, determina los minerales y vitaminas de los que carece el individuo y cuántos metales peligrosos están constantemente en contacto con su cuero cabelludo. Nos pareció una buena alternativa a un artículo convencional sobre música; normalmente, escribir sobre grupos es tan interesante como dar una vuelta por tu barrio y pisar una mierda.

La siguiente vez que tuvimos noticias de ellos, nos dijeron que no todos estaban interesados en hacer la prueba. Al principio pensamos que era Keith el que se sentía incómodo con la idea por sentirse elegido debido a su situación capilar, pero debemos hacer constar que fueron Dimitri Coats, Steven Shane McDonald y Mario Rubalcaba—tres supuestos punks, ex miembros de Burning Brides, Redd Kross y Rocket From the Crypt—los que tuvieron miedo, por la razón que fuera, de que unos pseudocientíficos raritos de Texas analizaran sus preciadas greñas. Keith sí se animó y nos envió de inmediato un churro de pelo vía FedEx.

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Por el bien de la ciencia, y porque el resto del grupo rehusó participar, examinamos otras tres pruebas junto a la de Keith: la rasta de un tipo negro, un mechón pelirrojo de uno de nuestros colegas fotógrafos y un puñado de pelo que robamos del suelo de una barbería. Una semana después, el laboratorio nos envió varias páginas llenas de tablas y gráficos, que intentamos procesar y resumir en un lenguaje que a alguien le apeteciera leer.

BRAYDEN OLSON

Brayden es un fotógrafo con unos pelos como los del actor secundario Bob. También está un poco gafado (el día antes de terminar este artículo le apuñaló en el brazo un taxista después de discutir por una tarifa), así que era un buen candidato para este proyecto. El gráfico sobre “Elementos Nutricionales” del informe del laboratorio era confuso y mostraba que tiene mucho calcio, magnesio, hierro y cobalto en su sistema. Pensamos que eso era bueno, pero la siguiente página decía que el calcio “no está siendo utilizado de forma adecuada”, y que podía provocarle dolor en las articulaciones y niveles bajos de energía. Más preocupante era el exceso de cobalto, que puede deberse a haber estado expuesto a pintura o alimentos para animales, y manganeso, que está presente en la gasolina y en fertilizantes. La única explicación que encontramos es que Brayden pasa mucho tiempo en un albergue para vagabundos lleno de estiércol, colocándose con los vapores que desprenden unos trapos empapados de gasolina. Evidentemente no es el estilo de vida ideal para equilibrar el consumo de vitaminas y minerales. Según el informe, debería comer más ostras y semillas de calabaza y reducir el consumo de arenques en escabeche. Si Brayden continúa con sus malos hábitos corre el riesgo de sufrir fatiga, depresión y bradicardia, que al parecer es una condición que hace disminuir el ritmo cardíaco a menos de 50 pulsaciones por minuto. ¡Mal asunto!

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PELO MISTERIOSO DE UNA BARBERÍA

¿Qué se puede decir de un completo desconocido después de analizar su pelo? No mucho. El pelo de este tipo—suponemos que no es pelo de mujer porque parece pelo de hombre y, además, lo conseguimos en una barbería—es muy parecido al de Brayden en cuanto a composición química. La gran diferencia es que éste contiene mucho cadmio, a menudo provocado por el humo del tabaco o las fundiciones de zinc. Al igual que Brayden (y, sospechosamente, el resto de los participantes) también corre el riesgo de sufrir fatiga, alergias y bradicardia, y recibió el mismo críptico consejo dietético: comer menos repollo y col rizada y más pan de centeno, germen de trigo y moras, que contienen grandes cantidades de fitatos (ácido fítico en forma de sal).

LA RASTA DE UN NEGRO

¡Por fin alguien que está en bastante buena forma! Esta rasta es de un tipo que nos dijo que dejó las drogas y el alcohol años atrás, y esta vida sana exenta de vicios queda patente en los resultados de su prueba. Su pelo contenía más aluminio de lo normal, pero eso no supone un problema ya que la mayoría de la comida contiene esta sustancia. También tenía exceso de vanadio, pero no hace falta preocuparse por ello. El informe del laboratorio decía que corre riesgo de sufrir reacciones alérgicas, picor de piel y dolores de cabeza; de todas formas, todos los que viven en grandes ciudades sufren estos problemas, ¿no? Al igual que al resto, el informe aconsejaba que se comprara un montón de suplementos alimenticios. Sin embargo, en nuestra humilde opinión, está más que bien el tío.

KEITH MORRIS

Lo primero que nos llamó la atención sobre los resultados de Keith es que hay una tonelada de uranio en su pelo. No la clase de uranio que mata o convierte en superhéroe, pero aún así, ¡es jodido uranio! También tenía bastante arsénico en su melena pero, curiosamente, el informe se centraba más en el aparente exceso de cobre, el cual puede tener “un efecto antagonista sobre el zinc”. El informe advierte de que las grandes concentraciones de cobre también se han asociado con la caída del cabello. Quizá Keith sea consciente de ello y por eso se ha dejado unas greñas enmarañadas, para tener una cobertura máxima. El análisis de 25 páginas también incluye un gráfico llamado “Tendencias”, que señala una serie de dolencias que Keith puede padecer a menos que cambie sus hábitos diarios para una optimización del metabolismo. En concreto, Keith podría sufrir depresión y síntomas alérgicos no identificados, lo cual no suena del todo mal teniendo en cuenta que ha estado viviendo con el reactor de Fukushima en la cabeza. De hecho, es probable que el pelo de Keith fuera el más sano de todos.

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