La corta vida de Chicharito como delantero en Europa

Los delanteros son inestables, o al menos eso es lo que creemos. Sólo hace falta que tenga un mes de mala suerte para que nos empecemos a preguntar si ya “perdieron su toque” (esa cosa que les ayuda a ubicar un espacio lejos del portero y meter la pelota). Cuando empiezan a fallar, asumimos que seguirán fallando. Por ejemplo: el caso de “El Niño” Torres. Después de una racha sin goles, los dejamos morir.

Javier Hernández está a medio camino de la tumba. Ya lleva un rato sin ese “toque”. Parece que siempre está fuera de lugar. En el año 2011 tenía todo asegurado. Cuando jugaba con Wayne Roonie formaban en mejor dúo dinámico de ataque en todo el mundo. Tenía la energía que poseen los delanteros cuando se sienten seguros de sí mismos. Era como si pudiera meterle un gol a cualquiera. Siempre lo hacía.

Pero tan pronto llegó a ser el próximo mejor goleador del mundo, se desvaneció. El equipo Manchester United adquirió a Robin van Persie durante el verano de 2012 y el Chicharito dejó de ser parte de la rotación en la que solía ser un jugador necesario. Va a pasar la temporada 2014-15 jugando para el equipo equivalente en Madrid por que en el Manchester United no hay lugar para él, ni siquiera como refuerzo. Es probable que esto no termine bien. Volvió a ser la segunda opción de otro gran club. Además, ya tiene una desventaja ante los ojos de los madridistas: no es Radamel Falcao.

Los numero nueve del Real tienden a recibir una cantidad increíble de crítica por cometer el más mínimo error. Gonzalo Higuaín es un jugador internacional que metió 107 goles en los 190 partidos que jugó para el Real Madrid. Lo consideraron prescindible, lo despidieron sin homenaje alguno y lo enviaron a Napoli durante la temporada baja. Trajeron desde Lyon a Benzema para sustituir a Higuaín pero ha decepcionado a todos por que sólo es “muy bueno”. Chicharito entró al Real Madrid como jugador de banca, no para quitar a Benzema del puesto titular. Benzema es el hombre que remplazó a Álvaro Morata (el único delantero que les ha gustado a los fans del Real Madrid en años recientes, un canterano, y quien no duró lo suficiente como para que lo odiaran). Si el mexicano falla un par de tiros en su debut, los murmullos de desaprobación resonarán por todo el Estadio Bernabeau. Es un público demasiado exigente.

Los fans del Real Madrid no esperaban que el club adquiriera un delantero sustituto antes de la fecha límite, que fue el lunes pasado. Habían rumores de que Falcao (quien probablemente sea el mejor goleador junto con Messi y  Ronaldo) usaría el uniforme blanco por años y, hasta hace sólo unos días, todo indicaba que por fin se harían realidad estos rumores. Sin embargo, las negociaciones tomaron un rumbo distinto y el colombiano terminó con el Manchester United. La firma del contrato habría sido la conclusión lógica para el verano más “galáctico” del presidente Florentino Pérez. Una línea frontal con Ronaldo, Bale y Falcao es como empezar la Capilla Sixtina, algo que a Pérez le hubiera encantado hacer si tan sólo la Capilla fuera más móvil.

En vez de eso, el Real Madrid contrató al Chicharito (el tipo al que alejaron para darle un lugar a Falcao). En este punto de tu carrera, no es un jugador que inspire mucha confianza. Sólo tiene 26 años de edad pero sus ojos hundidos dan la impresión de que no ha dormido desde que era adolescente. Además, ya hemos visto muchos tiros del triste Hernández en la línea delantera como para seguir considerándolo vivaz. En la Copa Mundial tuvo un desempeño muy bueno como refuerzo de México, pero también hizo muchos comentarios sobre lo descontento que estaba por no ser titular.

Sin embargo, aunque Chicharito esté teniendo una mala racha, eso no significa que no pueda recuperarse. Los eones y unas cuantas temporadas son sinónimos en el ámbito del futbol soccer, aunque, en realidad, no son lo mismo. Hace mucho tiempo, a principios de esta década, el Chicharito demostró que podía moverse entre las defensas como si fuera un papalote en una corriente de aire. Apenas tiene veintitantos años, técnicamente se encuentra en la plenitud de la vida. Podíamos asumir que sus piernas aún funcionan y que no se le ha olvidado por completo cómo lanzar la pelota hacia donde no esta el portero. La existencia de Falcao y el peso de la desaprobación de los fans le ha afectado pero aún así, el Chicharito puede redescubrir lo que lo hacia emocionante al principio. Tiene tiempo y talento de sobra, aún cuando parezca que se le están acabando.

Este artículo fue publicado originalmente en VICE Sports, nuestra nueva plataforma de deportes.