"Odio que me tengan lástima": hablamos con la reina sorda colombiana

Ser sordo puede sonar difícil. ¿Ser una reina sorda? Algunos podrían decir que más difícil. Eso es precisamente lo que incentivó a Daniela Olivar Vallejo a postularse como candidata del Reinado Nacional del Bambuco, que se celebrará el próximo 28 de junio en la ciudad de Neiva.

El año pasado logró coronarse como la reina Departamental del Folclor del Tolima, dejando a más de un escéptico con la boca cerrada y abriéndole la puerta a una de sus mayores aspiraciones: ser la dura del modelaje y del baile en Colombia.

Esta mujer de 19 años, nacida en El Espinal, Tolima, perdió la audición a los dos años a causa de una rubéola. Lleva 17 agudizando los otros cuatro sentidos y sabe que con eso le basta para darle la pelea a cualquier otra persona oyente.

Pese a que no entendía nada de lo que me decía a través de su lenguaje corporal, no podía parar de mirar las vehementes señas que iba dibujando en el aire, mientras Ruth, la intérprete, traducía ágilmente las respuestas. Hasta ahora se va a graduar del colegio, pero ya sabe lo que quiere ser y hacer con su vida. Pocos oyentes y sordos la tenemos tan clara antes de salir de la burbujita escolar.

VICE: Daniela, ¿en qué momento decidiste que querías ser reina?
Daniela Olivar: Es un deseo que he tenido desde siempre. Suelen pensar que una persona sorda no puede concursar en este tipo de espacios, pero yo lo puedo hacer. Esto es algo supremamente cultural de nuestro país y me encantaría hacer parte de eso. Vi la posibilidad y decidí participar. Sé que siempre han participado oyentes, entonces esto ha sido un impacto importante y he logrado el apoyo de muchas personas.

¿Han juzgado tu belleza de manera diferente por tu condición?
No realmente. Las críticas estéticas han sido iguales que como si fuera una persona oyente, pero sí siento que los jueces han sido reservados y cuidadosos conmigo en cierto momentos. Pero de todas formas he podido trabajar con la gente y me he sentido como un equivalente.

¿Crees que quieres ser reina para poder romper barreras?
Sí, yo quiero mostrar que las personas sordas podemos superar nuestras incapacidades y lograr lo que nos propongamos. La idea es visibilizar a los sordos en Colombia para que salgamos de esa sombra que nos han impuesto.

¿De qué manera le ha ayudado tu condición a tu carrera y a tu vida?
La capacidad visual que tengo me han ayudado a superarme a mí misma y a entender el espacio a mi alrededor de una manera distinta. Además, siento que al no ser oyente, puedo incidir en otros espacios y en otras personas.

En los reinados como el del Bambuco, el baile es algo supremamente importante. Cuéntame cómo es bailar a través de las vibraciones.
Desde los siete años he visto cómo las reinas bailan para este tipo de concursos y eso siempre me gustó. Por ejemplo, yo veía el San Pedro y era algo en lo que siempre había querido participar. Y aunque siempre son personas oyentes las que están ahí, yo me dije a mí misma que eso también era para mí. Mi familia no me apoyó en un principio, pero gracias a una intérprete pude mediar con ellos y les demostré que esta era mi pasión.

No necesito escuchar para poder bailar. Yo siento la vibración y el ritmo de la música en el piso y con eso ya sé cuántos pasos debo dar. Ya lo tengo súper interiorizado. Además, tuve un profesor que me enseñó cómo tocar la guitarra por medio de la vibración del cuerpo del instrumento en mi estómago y eso me ha ayudado muchísimo.

¿Asumen que eres menos capaz intelectualmente?
Sí, pero yo no le presto atención a la gente que piensa eso. Sigo haciendo mi trabajo y mis cosas. Me he enfocado en mí para demostrarles que están equivocados y dejarlos callados.

Pero una manera de discriminarlos también es pobretiándolos o teniéndoles lastima, ¿no?
Claro, eso no me gusta. A quienes me pobretean, les digo que yo tengo mi capacidad intelectual, que soy un ser humano igual que ellos. Odio que me tengan lástima porque eso no me permite ser una persona como cualquier otra.

¿Qué es lo que te atrae del universo de las reinas?
El baile: eso es lo que más me apasiona. También quiero incentivar a que los sordos también participen en estos espacios folclóricos. Son pocos los que se atreven a mostrar sus habilidades. En El Espinal antes había más sordos que participaban en este tipo de actividades, pero con el cambio de alcaldía eso disminuyó.

¿A dónde esperas llegar?
Quiero generar incidencia en diferentes espacios. Quiero desarrollarme profesionalmente y ayudar a la comunidad sorda para encontrarle soluciones a los problemas sociales que los agobian. Por ejemplo, los padres a veces no los dejan participar en reinados o en diversas actividades entonces quiero propiciar un ambiente más inclusivo para la gente como yo.

¿Cómo podemos ser más inclusivos?
Cambiando el pensamiento que tienen: ¡Nosotros podemos hacer lo mismo que todos ustedes!