Una experta en fotos de penes nos dijo qué opina de la que envió el Defensor del Pueblo

Mientras todo el país dedicaba largas horas de esta semana a mirar y comentar una foto censurada del pene de un funcionario público que, en teoría, es el encargado de velar por los derechos humanos de los colombianos, yo estaba ahí sentado pensado en que jamás le he tomado una foto a mi pene.

Ver a un hombre de casi 50 años que –por todas las razones equivocadas– se había animado a explorar la práctica sexual millennial por excelencia, generó en mí un mar de incertidumbres: ¿será que me he quedado atrás y me estoy perdiendo de todo un mundo de placer inusitado?, ¿será que la moraleja de la fábula del Defensor del Pueblo es que debo mantener siempre la tela de los bolsillos entre mi pene y la cámara de mi teléfono?, ¿cuál es el rollo con ver fotos penes?, ¿son necesariamente asquerosas y ofensivas?, ¿depende de quién, cómo y cuándo la esté ofreciendo?

Por eso me puse en contacto con Madeleine Holden, una mujer neozelandesa que es escritora, colaboradora de Noisey y experta en fotos de vergas. Exacto: desde 2013 mantiene un blog llamado critiquemydickpic, en el que hombres de todo el mundo le envían fotos de sus vergas en busca de una reseña técnica y honesta, basada en criterios como encuadre, composición e iluminación, en lugar de tamaño, rango o billete. Su idea es crear un lugar donde, alejados de las presiones del mundo contemporáneo, los penes puedan ser ellos mismos.

Madeleine no sólo me dio todos los do's & dont's de las fotos de penes, sino que también accedió a comentar acerca de la foto que ha estado en todas las pantallas de Colombia durante esta semana.

Para Madeleine, las fotos de penes se atienen a las mismas reglas que cualquier otro avance sexual: nunca sin consentimiento. Ahora, el consentimiento sexual es un campo borroso. Según una muestra no significativa de mujeres que han recibido y enviado fotos con contenido sexual, el hombre no necesariamente tiene que esperar el mensaje de una mujer diciendo: "Quiero que ver una foto de tu pene, así que serías tan amable de… ". La consesualidad responde más a una cuestión de buen gusto y sentido común, aunque algunas mujeres se sienten cómodas con la siguiente regla: no le envíe fotos de su verga a una mujer que no le gustaría verla en persona.

En cuanto a las fotos que Otálora envió a su secretaria privada, Madeleine las toma como una descalificación automática por acoso, pero accedió a reseñarlas en honor al profesionalismo. Obviando el contexto, las califica como unas fotos que a duras penas podrían ser consideradas aceptables:

"La foto fue tomada en exterior, lo cual generalmente suele ofrecer una luz favorable, y haber incluido los muslos le da algo de perspectiva. Sin embargo, la pose es poco creativa y perezosa. El fondo está lleno de distracciones y, en general, no hay ninguna composición".

A parte de decir lo único que no se ha dicho acerca de las fotos del pene del Defensor del Pueblo, Madeleine afirma que si hubieran sido sometidas al sistema de evaluación de su página, habrían obtenido un tres sobre cinco. Vale la pena anotar que la idea detrás de hacer un blog de fotos de penes es consolidar un espacio seguro en el que los hombres puedan someter su propio proyecto erótico a consideración de una experta, así que la idea es mantener a los participantes motivados. Para Madeleine los penes nos son desagradables ni ofensivos, el problema es que suelen ser presentados de una manera indelicada y las mujeres prefieren ver un esfuerzo visible en la manera en la que son presentados.

¿Y qué merece un cinco sobre cinco? A partir de las reseñas que Madeleine hace en su página, pude deducir tres reglas para obtener unadick pic sexy, elegante y que puede alegrarle la noche a una mujer consintiente:

• Más que verga: una foto de su pene no tiene que ser sólo de su pene. Las mujeres prefieren ver una foto que incluya algo de abdomen, muslos, pechos o nalgas. Para los más arriesgados, la boca y la cara completa son un plus. En general, las mujeres suelen preferir una foto del paquete completo en lugar de un acercamiento a una verga anónima y sin contexto.
• Comunica, hermano: ya que usted está completamente desnudo tomándole una foto a su pene, desinhíbase: la pose cuenta. Unos boxers o una camisa pueden darle un toque viril a su autoexploración. No porque usted esté obligado a ver su pene centrado y desde arriba significa que todo el mundo tiene que hacerlo; una foto de un pene duro bajo unas cobijas da puntos una tarde fría.
• La técnica moja cuco: una foto oscura, mal encuadrada y con fondo ruidoso siempre va perder frente a una foto con algo que tenga dirección de arte. Evite una foto con el lavamanos, su teclado o el inodoro como único fondo.