Extraperlo estrenan su vídeo para "Chill aquí"

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Desde que empezamos a escuchar las canciones de Chill aquí en diciembre, el disco de Extraperlo no ha parado de crecer. Arrancó poco a poco, como un mantra que podía bailarse sin salir de la habitación para acabar bailándose en salas y festivales de media España. Aprovechamos el estreno de su nuevo vídeo para la canción "Chill aquí", protagonizado por Leticia Dolera y un Borja Rosal tragicómico para hablar con el grupo sobre hacer un disco sin discusiones, confiar en ti mismo y la vida nocturna barcelonesa.

NOISEY: Os soléis plantear algunas ideas muy marcadas para arrancar la grabación de cada disco. ¿Cuáles eran en esta ocasión?

EXTRAPERLO: En este caso ha sido diferente a los otros dos discos, en los que primero venían las canciones y luego se producían de una manera determinada. En Chill Aquí existían unas premisas de producción muy claras sobre las cuales construíamos las canciones. Todos los temas partieron de un ritmo repetitivo y un loop con un riff constante y a partir de ahí compusimos las melodías de forma libre sobre letras escritas de antemano. Paradójicamente, el disco en el que hemos coincidido menos los cinco en el estudio, ha acabado siendo el disco que tiene más ideas relevantes de todo los integrantes. Nos hemos dado cuenta de la manera en la que trabajamos bien. Si vamos todos al estudio es un desastre, si en cambio van dos personas y muestran sus avances al resto al día siguiente todo fluye mejor. Hay menos discusiones a la hora de crear una idea y los otros tres son oídos frescos cuando la escuchan. Hemos aprendido a hacer que un disco no se convierta en un proceso dramático.

Hay una cosa que me llama mucho la atención en el disco, son los bajos de Aleix, que suenan a la vez funk pero con progresiones casi prog rock. Vuestros discos siempre son un poco iceberg. Se puede identificar un sonido muy claro pero hay mil referencias que se escapan, ¿Qué estabais escuchando al componerlo?

Sí, creo que eso hace nuestra música más interesante que otras. Intentamos huir de lo evidente sin dejar de hacer canciones que nos resulten pop. Es nuestra manera natural de afrontar la composición sin darle mucha importancia a que la gente vea solo la punta del iceberg o decida bucear para llegar a la base del mismo. En esta ocasión, buscamos un sonido de batería más setentero y orgánico que contrastara con una voz producida con pitch y efectos de modulación. Nos molaba pensar a la vez en Luccio Batisti como en Jam City a la hora de construir o en el groove de Chic y en Blood Orange. Al fin y al cabo, pensar en lo nuevo y lo viejo teniendo muy clara nuestra identidad como grupo.

En vuestras canciones se pueden ver un mapa de la vida nocturna barcelonesa un poco decadente, con sitios como el Negroni o el Klavier. ¿Qué es lo que os empuja hacia estos sitios? A la vez hay cierta decepción con la ciudad. ¿Cómo la veis actualmente?

Cuando hablamos de bares no hay ficción sino pura vivencia. Somos gente nocturna, la vida de noche es una expansión concreta del individuo que nos gusta retratar. Al Klavier vamos de vez en cuando, nos parece un lugar fascinante y con aura, es uno de los pocos lugares donde te puedes tomar una copa a partir de las 3:00 sin entrar en una discoteca y puedes cantar temas con Joan Miró (miembro de Lone Star) al piano. Nos flipa ver como unos cuantos elegidos de sesenta años se comportan de una manera muy parecida a cómo lo haría un tipo de 27 o 30 años y que como decía Battiato, "los deseos no envejecen a pesar de la edad". Utilizamos ese contexto para disertar sobre el paso del tiempo de otra manera.

La decepción con la ciudad nace de la sensación de que Barcelona había dejado de ser un lugar que atraía talento de fuera para convertirse en un lugar más provinciano, menos arriesgado y vanguardista. Por suerte, volvemos a notar esa energía especial que habíamos percibido en un momento dado, gente haciendo cosas molonas en la ciudad en diferentes disciplinas transmitiendo una idea moderna y avanzada de la ciudad.

Las letras son más abiertas y claras. Hay deseo y también muchos estribillos en segunda persona.

Hay una parte de voluntad de hacernos más entendibles, desde luego. La verdad es que no nos sentimos más viejos que cuando grabamos nuestro primer disco hace ya 7 años, somos jóvenes todavía, pero sí más seguros de nosotros mismos. Antes éramos más crípticos, quizás era como una especie de miedo a incomodar, ahora creemos que incomodar a veces es bueno. Cantar un mensaje jodido sin dejar espacio a la interpretación nos parecía sincero y necesario. Dicho esto, creo que en nuestros anteriores discos tenemos grandes letras que transmiten un montón de cosas buenas de las que no nos arrepentimos ni sentimos vergüenza alguna.

En este sentido también el papel de Borja en directo ha ido creciendo y soltándose poco a poco…

Se trata de un ejercicio de deshinibición, de entender que no puedes subirte al escenario con vergüenza. Si tienes miedo o vergüenza mejor bájate porque estarás mejor haciendo otra cosa, hemos perdido esa vergüenza a base de tocar muchos conciertos. Si tienes confianza en lo que estás haciendo te da completamente igual que a alguien pueda no gustarle lo que haces y empiezas a pensar en transmitir tu música a lo grande, sin reparo alguno. Ahora nos sentimos más libres encima de un escenario y de ahí que nuestra actitud pueda resultar más expansiva.

¿Por qué no hay en este disco canción de Cacho o de Aleix?

Sí las hay realmente. "Lo Nuevo y lo Viejo" es de Cacho y está cantada por él y por Pau, la melodía de "Klavier" la compuso Aleix aunque la cante yo (Borja) y hay un montón de riffs y loops compuestos por uno y por otro, no hay una composición unidireccional. Todo el mundo ha hecho de todo en el disco aunque luego sonemos como un grupo ordenado y con roles concretos, necesarios para construir una identidad.

¿Qué nos podéis contar sobre el vídeo?

El vídeo nos parece muy fresco. Teníamos muchas ganas de trabajar con Tomás Peña y con el resto de los Manson. Sabíamos que él era muy fan del grupo y que era capaz de pensar en nuestra identidad, poniendo lo mejor de sí. De hecho, la circunstancia de contar con poco presupuesto para el vídeo se acabó convirtiendo en algo muy positivo. El hecho de no poder reconstruir un supermercado real y que Sawe dibujara todo, hace del vídeo algo único y sorprendente. Si a eso le sumas la aparición de Leticia y mi manera ridícula de seducirla, encuentras motivos suficientes para no perdértelo.