El estilo mexicano y las mejores peleas de 2016

Honor a quien honor merece. Francisco "El Bandido" Vargas podría protagonizar por segundo año consecutivo una Pelea del Año. En 2015 ofreció contra el japonés Takashi Miura una de las peleas más dramáticas y sangrientas de los últimos años. Y en 2016 volvió a hacerlo contra el veterano Orlando Salido en una pelea que pese a haber terminado en empate fue la definición de eso que hemos dado en llamar el "estilo mexicano".

A diferencia de otras aproximaciones, el "estilo mexicano" no está hecho para conseguir récords históricos pues su esencia misma se lo impide: un peleador de estilo mexicano deja algo de sí en el ring cada que vez que sube a pelear. Así, su legado no es numérico; es, en cambio, memorable, humano. Y el siglo XXI ha sido propicio para su reconocimiento: Érik Morales y Marco Antonio Barrera (2000 y 2004), Israel Vázquez vs. Rafael Márquez (2007 y 2008), Juan Manuel Márquez vs. Juan Díaz (2009), Giovani Segura vs. Iván Calderón (2010), Juan Manuel Márquez vs. Manny Pacquiao (2012) y Francisco Vargas vs. Takashi Miura (2015).

Por supuesto la pregunta obvia es: ¿cuál es el estilo mexicano? Con la lista anterior uno podría lanzar algunas ideas: es boxeo frontal, aguerrido, que responde al ánimo y las expectativas de su público, que busca el nocaut antes que llegar a las tarjetas, etcétera. Muchos podrían nombrar a varios boxeadores que cumplen estos requisitos sin necesariamente llamarles de "estilo mexicano". Nicholas Walters o Miguel Cotto son dos aguerridos boxeadores que saben castigar y noquear a sus oponentes. No son de estilo mexicano, sin embargo. Sergey Kovalev y Gennady Golovkin, con su pedigrí amateur, quieren convencernos de que lo que protagonizan son peleas de estilo mexicano. ¿Fue estilo mexicano la derrota de Kovalev contra Andre Ward? Al ver que Ward lo neutralizaba ¿por qué Kovalev no se lanzó a matar o morir en un último intento por conseguir la victoria? ¿Y por qué decir que Golovkin practica un estilo mexicano si nunca se ha visto enfrentado a la adversidad? Porque enfrentarse a la adversidad y salir avante yace en el corazón de eso que llamamos estilo mexicano. Y los boxeadores enlistados anteriormente triunfaron pese a la adversidad. Por esa razón la mejor pelea para mí, siguiendo este criterio, no es otra que el empate entre Francisco Vargas y Orlando Salido.

Con semejante demostración de coraje bien representada y valorada, las siguientes peleas en esta lista son una mezcla de trascendencia histórica, competitividad, agallas y brutalidad pura.

Hace no muchos años Moreno y Yamanaka fueron parte de una memorable constelación de pesos gallo que incluía a Abner Mares, Vic Darchinyan, Joseph Agbeko y Nehomar Cermeño, entre otros. Con sus fuerzas disminuidas pero con el espíritu intacto, en 2016 Moreno y Yamanaka intercambiaron caídas para una pelea memorable, en la que la victoria siempre estuvo a un golpe de distancia.

En una pelea competitiva gracias a la agresividad de Cuadras, Román González tuvo repentinamente que adaptarse a una nueva división y cavar profundo para conseguir su cuarto título divisional y con ello convertirse en el más grande peleador nicaragüense de todos los tiempos, al sobrepasar los tres títulos divisionales del grandísimo Alexis Argüello.

Esta fue una pelea de honesta brutalidad entre dos peleadores de peso completo dispuestos a todo con tal de mantenerse trascendentes en una conversación lejana. Que ni Chisora ni Whyte sean particularmente excepcional es lo que hizo todo el esfuerzo más excepcional aún. Nos muestra, además, lo difícil que es ser contendiente, mantenerse apenas a flote, lejos de los reflectores.

Sucedió algo raro en 2016. Como pocas veces pudimos ser testigos de esas peleas de "el mejor contra el mejor". En el caso de Kovalev contra Ward la trascendencia era clara, pues Ward subía una división para enfrentar a uno de los mejores semicompletos de la actualidad. Cómo superó la adversidad y boxeó a Kovalev será siempre digno de recuerdo y una medalla más a su impresionante hoja de servicios.

El vencedor de la pelea entre Thurman y Porter, en cambio, no podía aspirar a coronarse como el mejor de los wélter, pero su pelea en cambio fue de una fiereza y potencia que hace ver el encuentro de Kovalev y Ward como un entretenido juego de ajedrez.

Para terminar hay que decir que las listas de "lo mejor" siempre serán debatibles. Hubo muchas otras peleas que valieron la pena, pero por una u otra razón las seis peleas arriba enlistadas permanecieron en mi mente incluso semanas después de haber sucedido. No obstante, en el camino de 2016 tuve la oportunidad de admirar la maestría de Vasyl Lomachenko, a los underdogs como Kiko Martínez o Soto Karass; o a los underdogs que de pronto se convirtieron en terribles verdugos, como Joe Smith Jr., y obviamente admiración por esos peleadores que nunca protagonizan una mala pelea, como Ruslan Provodnikov, Nicholas Walters, Leo Santa Cruz y John Molina Jr. y, culposamente, por esos boxeadores que son víctimas de un espectacular nocaut, como Shimmell a manos de Gassiev, Martínez a manos de Lomachenko o Fonfara, abatido por Smith Jr. Abajo una lista complementaria de peleas que bien podrían estar en cualquier otra lista de 2016, cada una de ellas evidencia de que el boxeo sigue vivo y en buen estado de salud.

Vasyl Lomachenko vs. Nicholas Walters

Carl Frampton vs. Leo Santa Cruz

Ruslan Provodnikov vs. John Molina Jr.

Rex Tso vs. Ryuto Maekawa

Leo Santa Cruz vs. Kiko Martínez

Carl Frampton vs. Scott Quigg

Joe Smith Jr. vs. Andrzej Fonfara

Felix Sturm vs. Fedor Chudinov 2

Denis Lebedev vs Murat Gassiev

Nathan Cleverly vs. Juergen Braehmer

Yoshihiro Kamegai vs. Jesus Soto Karass vs II

Juan Manuel López vs Wilfredo Vázquez Jr.

Vasyl Lomachenko vs. Roman Martínez

Errol Spence Jr. vs. Chris Algieri

Krzysztof Glowacki vs Steve Cunningham

Murat Gassiev vs. Jordan Shimmell

Evgeny Gradovich vs. Jesús Galicia