La música clásica relaja a los gatos durante cirugías

Este artículo fue publicado originalmente en Motherboard , nuestra plataforma dedicada al mundo de la tecnología.

Desde el gato del teclado hasta los gatos musicales, los felinos amantes de las melodías son un elemento básico de la cultura popular. Pero de acuerdo con una nueva investigación de la Universidad de Lisboa, la música es más que una fuente de entretenimiento para los gatos, también podría ser un anestésico.

"Existen varios estudios en seres humanos, adultos y niños, que indican que la música tiene efectos benéficos para los pacientes con dolor", me dijo Miguel Carreira, veterinario y profesor de la Universidad de Lisboa, por correo electrónico. "La adición de agentes no farmacológicos, como la música, es […] muy importante en el escenario médico y quirúrgico".

Carreira quería saber si los gatos sometidos a cirugía experimentan los mismos beneficios de la terapia musical en los humanos, por lo que reunió a un equipo de veterinarios para abordar la cuestión. El resultado, publicado esta semana en el Journal of Feline Medicine and Surgery, puede ser el estudio médico más adorable de la historia.

El equipo colocó audífonos en 12 gatos sometidos a ovariohisterectomías electivas (el término médico para esterilización). El personal colocó los auriculares sobre las orejas de cada gato durante la operación y realizó dos extractos minuciosos de tres canciones de géneros muy diferentes: "Adagio For Strings (Opus 11)" de Samuel Barber, "Torn" de Natalie Imbruglia y "Thunderstruck" de AC/DC.

Al controlar la frecuencia respiratoria y el diámetro pupilar de los gatos anestesiados, Carreira y sus colegas pudieron hacer suposiciones acerca de sus niveles de estrés. No es extraño que los gritos de Brian Johnson hicieran hincapié en los gatos, mientras que las piezas clásicas de Barber los calmaron. Parece que eran sólo una especie de "meh" sobre Imbruglia.

"Considerando que la música es un concepto complejo que representa una naturaleza variable y límites borrosos", dijo Carreira, "variantes como ritmos por minuto, ritmo o armonía -que no fueron evaluados en este estudio por su naturaleza exploratoria- pueden ser útiles para entender por qué los gatos pueden preferir ciertos géneros musicales y distintos compositores".

"Lo que se prueba es que a medida de que el cerebro interpreta y procesa los estímulos musicales, se activan una serie de reacciones y mecanismos bioquímicos sucesivos que inducen diferentes respuestas en el cuerpo", agregó.

En caso de que sospeches que los niveles de ruido sólo podría haber sido responsables de las preferencias de los gatos, vale la pena señalar que el equipo de Carreira fue cuidadoso para mantener el rango de decibeles.

"El volumen final al que cada paciente estaba expuesto siempre fue uniforme, y menos de 80 decibeles", me dijo. "En el estudio, se midió y confirmó la salida final de decibeles suministradas por el reproductor de mp3 al paciente a través de los auriculares, utilizando un dispositivo Digital Sound Noise Level Meter, con el fin de garantizar que el valor final fuera inferior a 80 decibeles para tres géneros musicales ".

El estudio sugiere que ciertos géneros de música podrían desempeñar un papel importante en los animales cuando visitan al veterinario. Este enfoque podría conducir a una reducción de la cantidad de anestésico necesario para la cirugía, lo que reduciría los efectos secundarios de la sedación farmacológica.

Carreira quiere probar este enfoque con otros animales y, en última instancia, realizar resonancias magnéticas y análisis electroencefalográfico en sus pacientes. "En el futuro [queremos continuar] el estudio [con] perros, usando cortisol, catecolaminas y glucosa en sangre como nuevos parámetros para la medición", dijo. "Estas técnicas serían muy útiles en el futuro desarrollo de la investigación".

Será interesante ver si otros animales comparten el gusto clásico de los gatos, o si habrá cualquier otro animal doméstico del. Tal vez los perros estarán bien con Snoop Dogg, mientras que los roedores se relajan escuchando los más grandes éxitos de Modest Mouse. Cualquiera que sea el resultado, la idea de que los animales sean capaces de escuchar melodías para la ciencia es bastante convincente por sí misma.