... ¿Por qué se tiene una retórica tan escandalosa cuando se habla de Hope Solo? | ES | Translation

A la portera estadounidense Hope Solo le bastaron cinco minutos para que le tiraran a puerta el pasado lunes 8 de junio en el debut de su selección en el Mundial femenino de Canadá. Si Solo no hubiera sido capaz de rechazar el tiro de la australiana Emily Van, la historia habría sido diferente durante todo el torneo: finalmente, los periodistas hubiesen podido señalar una presunta "decadencia" de la jugadora.

En su lugar, Solo desvió el balón fuera de peligro y además hizo otras dos grandísimas atajadas para los Estados Unidos durante el primer tiempo, lo cual mantuvo el juego cerrado para después asegurar una victoria de 3-1. A pesar de su magnífica actuación, las preguntas relacionadas con sus problemas fuera del campo de juego se hicieron presentes con todo y que los oficiales de prensa de la Selección Estadounidense intentaron, sin gran resultado, limitar las preguntas a sucesos relacionados con el partido.

Un reportero de USA Today fue el ganón en hacer la primera, y única pregunta, acerca del estado mental de Solo como resultado de un reporte reciente en la sección Outside the Lines de ESPN en donde se revelaron nuevos detalles de su arresto en Junio de 2014. ¿Cuál fue la respuesta de Solo? "Estoy perfectamente enfocada, señor, Perfectamente enfocada."

La gran concentración de Solo, y de todo el equipo, ha acaparado las miradas en los últimos dos días. También ha habido arremetidas que hablan del tema de Hope Solo como una distracción, y ataques de los mismos ataques, e incluso más cuestionamientos por la forma en la que la Federación de los Estados Unidos ha manejado la situación.

Después de todo, el mundo está al pendiente, a pesar de que el momento de la distracción más reciente es maliciosamente oportuna. El hecho de que haya sido ESPN, perteneciente a ABC/Disney —la cual le ha sembrado el camino a Solo para presentar la versión positiva de su historia—, lo hace mucho más curioso.

Primero fue la aparición en febrero en el programa Good Morning America de ABC en donde se tocó el tema de su arresto y su suspensión; después el sitio ESPNW sacó un extenso perfil de Solo justo antes de la Copa Mundial. Ni siquiera ESPN/ABC/Disney saben qué versión de la historia creer. Nosotros tampoco.

A parte de los reportajes de ABC/Disney, Solo escribió un blog en su sitio web sobre el incidente. Sin embargo, es debatible si esto le provocó más daño que beneficio.

Hasta este punto, es irrelevante si Solo ha madurado como persona debido a este incidente —y muchos otros incluyendo la suspensión de enero después de que su esposo Jerramy Stevens fuera arrestado por manejar una camioneta propiedad de la Selección de los Estados Unidos bajo la influencia del alcohol—, o si se la ha pasado fingiendo sus emotivas apariciones públicas para mantener un lugar como titular. La prensa ya ha tomado una decisión sobre de su carácter. Desde el domingo, la imponente respuesta ha tomado lugar junto con el encabezado en Deadspin: "El tour de redención de Solo son puras mamadas."

Y hay mucho más de donde sacarle.

([No, realmente](No really). Podría caber otro tema aquí).

No sabemos si un atleta del género masculino habría enfrentado una indagación similar, o si la prensa está sobrepasando sus ganas de prestar atención a los casos recientes de abuso doméstico en contra de las mujeres por parte de atletas: todo esto sigue siendo una pregunta relevante que rodea el caso de Solo.

Tampoco quiere decir que Solo sea inocente, o culpable, o alguien que se haya envuelto de nuevo en una mala situación y no merezca una segunda oportunidad para hacer bien las cosas. Ni tampoco deberíamos hacernos como que no ha sido alguna de las dos cosas sólo porque ha dado un buen juego en contra de Australia, o porque sus compañeras —quienes obviamente temen que una distracción pueda desviarlas de su sueño—, la hayan apoyado públicamente.

Pero cuando hablamos de Hope Solo, ¿de qué hablamos realmente? ¿Por qué el lenguaje tiene que ser tan opuesto y la retórica tan escandalosa?

Hope Solo hace sentir incómoda a mucha gente. Esto es verdadero ahora y desde antes de su arresto por violencia doméstica. Ahora los estándares son otros, y aun así la conversación generada por la prensa no se trata del todo de violencia doméstica. Generalmente, no se espera que las atletas sean las malas de la película, las perfeccionistas empedernidas, con chidas personalidades, o que sean unas ojetes creídas que abren demasiado la boca. O como en el caso de Hope Solo, todas a la vez.

Existe un espectro muy reducido de actos aceptables que le darían a cualquier mujer atleta cobertura nacional, especialmente en el fútbol femenil: modelos a seguir que exhiben una deportividad envidiable motivada por el amor al deporte. Las jugadoras deben sobrevivir una segunda fase de categorización una vez que han alcanzado el estatus de modelo a seguir. Una vez ahí tienen el placer de ser asignadas una de tres categorías: modelo de portada en bikini de Sports Illustrated, ama de casa responsable, o chica de poster de la comunidad LGBT.

Hope Solo ha caminado sobre la línea de algunas de estas etiquetas muchas veces en su carrera. Pero cuando se habla de Solo, se trata más sobre cada defecto de la personalidad que posee y menos sobre el acto en sí.

Pero de nuevo, Solo tiende a ser su peor enemiga. Durante años, ha sido motivada por su relación de ella misma contra el mundo. Su actitud la ha recompensado con excelencia en el campo de juego, tanto para su club como para su país, al punto de que la Federación Estadounidense parece estar perfectamente dispuesta a aceptar las repercusiones si eso implica agregar una tercera estrella al escudo en los uniformes del equipo nacional femenil.

Sencillamente, no hay espacio, hasta el momento, para tener una productiva conversación sobre Solo. Existen notas limitadas porque hay una limitada cobertura de Solo más allá de sus transgresiones. El fútbol femenil recibe tan poca cobertura a profundidad, en todos los niveles, por parte de la prensa deportiva líder —ya sea impresa, en línea, por televisión o radio, etc.—, que aún carece de contexto. Estos mismos canales de medios después se preguntan por qué más personas no se sienten enfurecidas por Solo, y es así como la retórica circular de la prensa se ve completada.

En septiembre, los medios y la Federación de los Estados Unidos no se hicieron ningún favor en la forma en que manejaron la situación de Solo. Desde entonces, sólo ha empeorado. Pero esta vez, hay alrededor de tres millones de pares de ojos viendo jugar a Solo, y esperando mirar si, tal vez, sólo tal vez, todos los artículos estaban en lo correcto.