Donde hay pelo hay alegría

Foto de Richard Kern

Todo el mundo cree que Suecia es un bastión de tolerancia liberal-socialista e ideología feminista, pero al parecer la mentalidad abierta de la gente de este país sólo llega hasta los sobacos. Si tus sobacos son peludos, todo ese rollo de la aceptación y los peligros de los prejuicios se va directamente al garete. Este alboroto sobre el pelo empezó en marzo, durante la final del Melodiefestivalen, un concurso televisado de canciones, cuando a una bibliotecaria, Lina Ehrin, se le vio durante un instante la pelambrera sobaquil, arrasando las retinas de millones de espectadores. Unos días después alguien subió la imagen a Facebook, cosechando miles de comentarios abusivos sobre lo asquerosa que era Lina por no depilarse. Se creó una página de Facebook llamada Ta Håret Tillbaka! (¡Que vuelva el pelo!) para defender el derecho de Lina a no depilarse, animando a las mujeres a colgar fotos de sus propias zonas peludas. La página rápidamente llego a los 15.000 “me gusta” y se colgaron cientos de fotos. El grupo empezó a organizar manifestaciones y el debate no tardó en llegar a los tabloides. Desconcertados ante tan enmarañado y absurdo escándalo, hablamos con Deidre Palacios, una de las fundadoras de Ta Håret Tillbaka!, y le preguntamos por qué sus conciudadanas están tan preocupadas por el pelo. VICE: ¿Qué queréis decir con eso de “que vuelva el pelo”? ¿Habéis conseguido algo?
Deidre Palacios: No hay que tomárselo literalmente. Se trata de mujeres que reivindican la revaloración del vello. No pensaba que fuese a crecer tanto. Creo que el debate está haciendo que la gente se abra a cosas distintas. Hoy una chica ha contactado conmigo y me ha dicho que su novio no acepta que deje de depilarse las axilas. Esto ha hecho que ella vea su relación con otros ojos. Hay una foto de tu propio sobaco sin depilar en la página de Facebook. ¿Te han ofendido los comentarios?
No; sin embargo, me preocupa que otras mujeres que han subido fotos de sus sobacos hayan recibido amenazas de muerte. Cuando pasa eso, llamo a la policía. ¿Por qué crees que los suecos han reaccionado así por un poco de pelo que, además, es completamente natural?
No lo entiendo. Trabajo como educadora sexual, hablo mucho con adolescentes, y me he dado cuenta de que el pelo es un tema tabú. Yo intento explicarles que todo el mundo es diferente. Algunos tienen más pelo que otros y no pasa nada. ¿Vas a organizar algún evento parecido a la manifestación que hubo en Malmö, en la que las chicas enseñaron sus sobacos sin depilar?
Creo que voy a ir aún más lejos. Muchos miembros son defensores activos de no depilarse, así que creo que podremos sacar algo de esto. Hace poco vi un vídeo en YouTube de unas chicas que cantaban una canción sobre el vello.