Mi Valentín hipotético

Como cada año, los días previos al 14 de febrero, las oficinas de redacción de muchos medios los tecleados son aporreados frenéticamente para llenar páginas (web o impresas) de melcocha que escape, de alguna manera, a la simplona patada en los huevos que resulta ser el día de San Valentín.

En el devaneo de estas fechas me tocó hacer mi top cinco de “los hombres que me daría [sic] un día del amor y la amistad”. La tarea me pareció difícil dado que no conozco a ninguno de mis galanes platónicos, y lo más probable es que ni en ésta ni en ninguna de mis 37 vidas siguientes tenga la oportunidad de estar con alguno de la lista el tiempo suficiente para saber si nos caemos bien.

Luego de haber leído el resultado, mis compañeros de oficina me dijeron que tengo daddy issues; mi desnutrido conocimiento del inglés me dice que eso se refiere al complejo de Electra, y mi desnutrido conocimiento de todo lo demás me hace imposible entenderlo, ya no digamos explicarlo. Pero sólo para que lo sepan: yo nada de nada con mi papá, simplemente creo que estos señores están guapos.

Dr. José Manuel Mireles Valverde

Es muy alto y delgado pero correoso. Como todos los michoacanos, el Dr. Mireles tiene una mirada bien chula. Con sus canitas y su rifle a manera de báculo, parece un Gandalf purépecha. Yo sí dejaba que me llevara a cenar unas corunditas para el 14 de febrero.

Danny Trejo

Ojalá un día Danny Trejo bailara “Los Machetes”. Pero mientras eso ocurre, debo decir que la corta estatura de este hombre (como la mía), sus cicatrices de la cara (que obivamente son de acné, pero no importa porque podrían ser de sus constantes madrizas en la cárcel o en sus juntas de AA), y su actitud de buena onda, me hacen quererle dar un abrazo.

Enrique Gratas

Ahora no puedo explicarlo, pero a mis nueve años —mientras él “daba seguimiento” a la "noticia" del Chupacabras (sin comillas hasta que alguien pruebe que no existió)— me parecía increíblemente atractivo.

Babo, de Cartel de Santa

Tiene un six pack contra el que podría romperme la nariz con gusto, un tatuaje de brazo completo, y le grita a los cuatro vientos que es un puercazo en la cama. Además es creador del enunciado: “ya sabe que mi sable es implacable”. Ya ganó, ¿no?

Steve Buscemi

Es el actor al que más le han disparado en Hollywood. Incluso mi prospecto número dos lo apuñaló en los brazos de Antonio Banderas. Me gustan sus ojos ligeramente estrábicos, y sus dientes chuecos, como los míos. No sé mucho de su vida pero parece que fue severamente impopular hasta sus 45 años. Yo creo que haríamos una buena pareja por un día.

Lo que me tranquiliza es que seguramente estas personas odian el 14 de febrero tanto como yo. Si nos encontráramos un día antes de la primera quincena de febrero, seguro iríamos a robar una botella de whisky barato e iríamos a la esquina más próxima a despacharla. Menos si se tratara de Enrique Gratas, se nota que es bien apretado.

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