FYI.

This story is over 5 years old.

FIGHTLAND

Tyson Fury interrumpe la celebración de Deontay Wilder

Wilder logró un nocaut devastador sobre el boxeador polaco, Artur Szpilka el sábado. Pero Tyson Fury se robó la atención demandando una pelea contra el campeón del CMB.

Deontay Wilder logró otra victoria por nocaut sobre un peso pesado la noche del sábado. Esta vez fue contra el boxeador polaco, Artur Szpilka, aumentando su récord a 36-0 con 35 de sus victorias llegando por la vía del nocaut.

La pelea no fue tan directa para el gigante estadunidense. Wilder, de dos metros de estatura, estaba teniendo problemas con Szpilka de menor estatura. Algunos medios consideraban que Szpilka estaba ganando la pelea hasta el tumultuoso noveno round y las estadísticas de CompuBox demostraron que había pocas diferencias entre los dos boxeadores, aunque después los jueces habían favorecido a Wilder en sus tarjetas, liderando con 78-74, 78-74 y 77-75.

Publicidad

Por las fallas técnicas de Wilder, no cabe duda de que su habilidad para finalizar una pelea sin avisar—uno de los aspectos más emocionantes del pugilismo de peso pesado. Este don, evidenciado por sus impresionante tasa de nocauts, no puede ser aprendido y rápidamente está ganándole al medallista olímpico de bronce el estatus de competidor que vale la pena ver.

El sábado no fue diferente. Con Szpilka entrando por la defensa de Wilder para conectar golpes, estaba dentro del alcance de "The Bronze Bomber"—y pagó por ello con la derecha de Wilder.

Sencillamente, fue uno de los nocauts más impresionantes que hemos visto, con el polaco quedándose inmóvil durante minutos hasta que el personal médico tomó control de la situación y se llevó a Szpilka en camilla. Después de someterse a una evaluación en un hospital cercano, se anunció más tarde que Szpilka se había recuperado.

Aunque mostrando respeto y preocupación por Szpilka, era un momento de celebración para Wilder, haciendo su tercera defensa exitosa del campeonato mundial de peso pesado del CMB. Sin embargo, entre todo esto, Tyson Fury vio la pelea desde un lado del ring antes de subir a confrontar a Wilder—tal vez por orden de los promotores, o porque es Tyson Fury y aparentemente hace lo que quiere, cuando quiere.

Llamando zángano a Wilder, y cantando una canción de manera improvisada, como lo hace con regularidad, Fury le dio al público un primer vistazo al personaje del "Rey Gitano", a pesar de que Fury ya se ha presentado en Estados Unidos, noqueando a Steve Cunningham en el Madison Square Garden en 2013—su única pelea en el país hasta ahora.

Publicidad

De frente, Wilder y Fury intercambiaron insultos en su rápida confrontación. Wilder no tomó con gracia las payasadas de Fury al estilo WWE, diciéndole a Sky Sports: "Lo he esperado durante mucho tiempo y ahora sabe donde encontrarme. Cuando llegue el momento—y llegará—más le vale estar listo porque estaré buscándolo para destruirlo… Lastimarlo, mucho".

Entonces parece que ambos hombres están buscando la pelea. Es obvio ya que ciertamente venderá muchos pago-por-evento, con ambos boxeadores declarando estar dispuestos a pelear en el Reino Unido o Estados Unidos.

Pero, ¿por qué esto ocurre ahora? Con Fury aceptando la revancha contra Wladimir Klitschko y Wilder haciendo su defensa del título del CMB contra el boxeador ruso, Alexander Povetkin más tarde este año—dos peleas que podrían terminar coronando dos nuevos campeones—la pelea entre Fury y Wilder tendrá que esperar.

La confrontación en el ring fue entretenida y acaparó titulares en la prensa deportiva—más que el nocaut del año de Wilder. No obstante, la guerra de palabras entre ambos parece un intento promocional: fue poco auténtica y falsa, sólo sirviendo como video promocional para crear atención para una pelea si ambos superan a sus dos oponentes y eventualmente se enfrentan en el ring.

Sin duda el poder de nocaut de Wilder y la boca de Fury venderían la pelea sin tener que recurrir a trucos como este.