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Música

Dios del Bass: Bassnectar no es un DJ. Es un movimiento.

Bassnectar es un valor atípico gracias a su indiferencia hacia las trampas de la fama.

"Tuve un muy lento y constante desarrollo desde el suelo haca arriba, sin ninguna intención de volverme famoso," declara Bassnectar. "Hasta el día de hoy sigue sin interesarme."

Como artista que comparte escenarios en festivales con muchos en busca de sus 15 minutos de fama, actos de EDM que rocían champaña, Bassnectar es un valor atípico gracias a su indiferencia hacia las trampas de la fama. Aún así, eso no lo ha hecho dejar de tocar en los festivales más grandes, de agotar las ventas de sus propias giras como acto principal, y de llevar un seguimiento casi de culto que le gana al de cualquier groupie.

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Streamea "Hold On feat. TURSI" del próximo álbum de Bassnectar Noise vs. Beauty exclusivamente aquí en THUMP

Bassnectar, aka Lorin Ashton, llegó a THUMP en las oficinas de Vice en Brooklyn hace unas semanas acompañado de una refrescante pandilla de uno, vistiendo una playera negra y shorts rotos como los que suele usar arriba del escenario, su melena que le llega a la cadera amarrada en un chongo. Era puro negocio, 100%: enfocado, entusiasmado y tan interesado en mi, mi historia y mis gustos musicales como yo en los de él.

"El terreno fue muy diferente cuando empecé," dice Ashton. "La definición de un DJ estaba cambiando. Estaba en la universidad entrenando para ser un consejero o quizá maestro de preparatoria y empecé a organizar raves gratuitos en el bosque y en bodegas."

El productor e intérprete de 36 años criado en San Francisco ha pasado 14 años diseñando su mortal mezcla de dubstep pesado, breakbeat, glitch y hip-hop—y ahora no hay nadie que suene como él. El 24 de junio, lanza su décimo álbum de estudio, Noise vs. Beauty. Una evolución más a fondo en el sonido Bassnectar, y un producto final al que se refiere como "su álbum más musical jamás." El lanzamiento de quince tracks trae nueve colaboraciones y viaja por los ventosos caminos entre pesados jams 808, bass hipnótico y hasta algunas pizcas de sabor hip-hop, una tendencia con la que ha jugado desde su colaboración en 2012 con Lupe Fiasco, "Vava Voom".

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Ashton empezó a trabajar en el álbum durante una interrupción en su gira de seis meses—primera vez que ocurre después de estar en la carretera por once meses a la vez, durante diez años. "Realmente fuí capaz de sumergirme," explica. "Empecé escribiendo música sin beats ni bass."

El proceso de grabación tuvo varias encarnaciones. En una versión sólo figuraba la guitarra, el piano y aleteos random de su propia voz. Colaboró con un montón de cantantes, compositores, vocalistas, bandas y MCs para que grabaran encima de las simplificadas versiones originales de los tracks de Ashton que terminaron escuchándose como "Sigur Ros vs. Bon Iver vs. Mumford and Sons vs. sepa la chingada." La versión final de NVSB encontró a Ashton esencialmente remezclando su propio trabajo que presentaba aportaciones de los artistas invitados y figurados eventualmente en el álbum.

"Terminé con canciones que en algunos casos, eran musicales dramáticamente complejos," admite. "Me sentí liberado porque amaba la música y por primera vez sentí que auténticamente no me importaba si a las demás personas les gustaba o no."

Se puede decir que a sus fans les va a gustar. Como artista, Bassnectar sabe cómo reconocer ese apoyo de manera tangible. Mientras que rara vez toca en clubes del tipo con servicio de botella, cuando sí lo hace—como en Surrender Las Vegas—le pide al venue que relaje su reglamento de vestimenta para acomodar el estilo loco y salvaje de sus fans.

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"Me identifiqué como miembro de una escena underground y no como DJ," explica Ashton. "Nunca intenté comercializarlo. Obtuve Bassnectar.net en 1998 porque quería hacer contacto."

Aunque podría costearse un estilo de vida más lujoso, Ashton vive modestamente, más como un consejero o maestro de preparatoria que un DJ trotamundos. Le da un dólar de cada boleto vendido a una organización sin fines de lucro como parte de su "Dollar Per Bass Head Program". Y aunque no ha ido a Burning Man desde hace un par de años, fácilmente reconoce el impacto que el festival tuvo en los primeros años de su carrera a final de los 90s y principio de los 00s.

"De repente existía este festival de freaks en donde podía ir a tocar cinco sets por noche para todos los rechazados y gente rara de alrededor del país," dice. "Alguien se me acercaba con un disfraz super loco preguntándome si quería tocar en su fiesta de bodega para Halloween en DUMBO o la fiesta navideña de un colectivo de arte en Chicago. [Burning Man] realmente fue una atmósfera propicia para esa cultura."

Bassnectar con su set del amanecer del domingo en Burning Man '09

Mientras que su sonido ha evolucionado, sus sets en vivo siempre se han caracterizado por un formato sin límites y abierto, presentado vía su método de clips de fuego rápido y loops estruendosos de cualquier género que te puedas imaginar. "Para mi, tocar como DJ es algo serio. Se trata de un collage sonoro sin reglas y de alta creatividad--que toma de diferentes culturas e ideas y las junta. Es una forma de arte."

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A pesar de su franqueza, a Ashton no le gustan tanto las discusiones que giran alrededor del EDM, por el momento. "Es una conversación en la que prefiero no participar. Creo que esa cultura mainstream comercializada es más el problema."

Ashton fue insistente en que respeta las preferencias personales de todos mientras que se da cuenta de que personas en ciertas partes del país solamente cuentan con exposición al lado mainstream del espectro EDM. Pero no es algo que quiere endosar, tampoco. "Cuando se trata de la mayoría de los DJs de EDM que existen no tengo ningún respeto o interés en lo que están haciendo. Me parecen algo falsos."

Bassnectar Nochevieja 2012 en Nashville, TN. Foto: Rukes.com

"Ha sido difícil ver algo tan especial ser diluido, asaltado y convertido en este tipo de carnaval descarado, barato y falso," continua. "Hasta ese grado odio el EDM. Me preocupa que esté agotando la autenticidad de la cultura DJ.. pero realmente no puedes tirarle odio a 30,000 personas que están pasando la mejor noche de sus vidas."

Sus preocupaciones sobre la autenticidad se aplican a él también. Repetidamente hace referencia a las concesiones que ha tenido que hacer para llevar sus shows a gran número de personas mientras mantiene accesible el precio de los boletos, pagándole a su crew de veinte miembros por no mencionar el costo de un visual masivo y producción de audio que le da vida a sus shows. "Podría escoger tomar la decisión de sólo tocar en un restaurante de pizza para 200 personas e ignorar a 5,000 chavos," reconoce. "Pero, ¿de qué me servirá y a quién estaré alcanzando? Prefiero tocar para un evento en un venue como Red Rocks para 20,000 personas durante dos noches."

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"Mi intención es tener un impacto sobre la cultura y la raza humana porque estoy auténticamente impresionado por la vida y estoy maravillado por la magia de cada momento. Hay muchas ocasiones en las que el verdadero arte y la autenticidad musical aprenden a ceder," añade. "Ese es el umbral de venderse para mi, y escojo ceder solo cuando siento que beneficia a mi música y a los fans. Si de alguna manera rebota y accidentalmente enriquece a la cultura, también está bien. Y si no, entonces eso es un problema."

Lo creas o no, Ashton dice que no estará haciendo esto para siempre. "Necesito averiguar cómo añadir otras misiones a la mezcla--Me encantaría escribir libros, leer más libros, ver más películas, hacer caminatas y visitar más cascadas, vestirme con disfraces raros y conocer a extraños." Ciertamente, el hombre que se toma "fotos familiares" en cada show--con el enfoque en el grupo de fiesteros, no el artista mismo que a menudo se cubre la cara con los brazos cruzados--es tan curioso acerca de la gente que escucha su música como lo es acerca de hacerla.

Hacia el final de nuestra plática, Ashton lee la letra de su canción "Noise" que dice resume aquello que él representa como artista y ser humano. "Hago lo que quiero hacer, es lo único que me ha importado./ Nunca he sido uno de los que persigue lo mismo que los demás. / La fama no significa nada para mí; sus nombres no significan nada para mí. / Si estás diciendo que cambié es claro que nunca me conociste."

Luego dice: "Se me acaba de poner la piel chinita, otra vez."

David estará escuchando Bass Head a todo volumen directito a su tumba. @DLGarber