Carlos Vela, el extraño fan del Real Madrid que quiere el Barcelona

Carlos Vela es un tipo diferente. Esto sin afán de hacerlo menos, pues ser distinto jamás ha sido malo. El mexicano es un hombre de un perfil que no suele comulgar mucho con el futbolista común y corriente.

Como es sabido, a Vela no le apasiona el futbol. Lo juega, es muy bueno, lo ha vuelto famoso y probablemente millonario, pero no le apasiona. El no ve juegos por la televisión, no practica en sus tiempos libres y tampoco tiene acaloradas charlas sobre el tema, es más dudamos que en sus consolas de videojuegos rueden mucho los FIFA o PES. Él, simplemente prefiere ver y jugar basquetbol.

Tras esta breve, y ya conocida historia, el mexicano ha declarado que no es hincha particular de algún club pues repetimos, poco le apasiona en el futbol más que jugarlo. Pero si existe predilección por un equipo en España, sin dudarlo, es el Real Madrid.

Vela es uno de los mejores futbolistas del planeta. Hace un año, estuvo en el 'XI' ideal de la Liga de las Estrellas haciendo tándem con Lionel Messi y Cristiano Ronaldo. Ser el goleador, asistente y estrella de la Real Sociedad lo ha llevado a estar en agenda de 'grandes', tanto de España como de Europa. Alguna vez sonó en el Real Madrid, ya estuvo a punto de ir al Atlético y ahora, hace apenas unas horas, lo pusieron como un candidato para reemplazar a Pedro en el Barcelona.

El 'Bombardero', si quisiera, podría ser futbolista del equipo que quisiera. Si las cosas se dieran, encajaría en la perfección del equipo culé. Difícilmente jugaría como titular teniendo a Messi, Neymar y Suárez, pero sin problema, podría ser el primer recambio del ataque blaugrana, jugando como extremo, centro delantero o incluso volante.

Además, Vela conoce el futbol español y su adaptación no sería complicada. No juega Champions, así que si el Barcelona lo contrata, podría ser de la partida de Luis Enrique inmediatamente en enero. Apenas tiene 26 años, lo que augura que al menos, le quedan cuatro años al más alto de los niveles, y para acabar, su costo no es para nada alto (30 millones de euros cuesta su carta de rescisión).

Pero, entre tanto halago, hay uno que otro punto flaco. El principal, Carlos Vela ya declaró que le gusta más el Real Madrid que el Barcelona, y eso en España, no se perdona. Esas ideas no han sido nuevas y tampoco las ha dicho en una sola ocasión. Hace años, recalcó que pese a que en el equipo blaugrana jugaba su amigo, "me tira más el Madrid. Yo soy blanco. Jugadores como Hugo Sánchez, Ronaldo, Beckham o Zidane han hecho que me guste el Madrid".

Tras estas palabras, pese al nivel, edad y precio, ver a Carlos Vela vestido de blaugrana será sumamente difícil. Así le importe un bledo el cuadro 'merengue', hay palabras que no se borran y dichas declaraciones le acompañarán si quiere fichar con los culés e incluso, con el Atlético de Madrid.

Incluso, en la infumable batalla por ver qué jugador es mejor, si Cristiano Ronaldo o Lionel Messi, el mexicano aceptó las cualidades de Lionel Messi, pero consideró al luso como su favorito.

Ya en alguna ocasión, y no hace mucho tiempo, un mexicano se fue de boca al afirmar que era hincha de un club rival a la playera que defendía. Fue Raúl Jiménez, fichaje del Atlético de Madrid quien tuvo que ver cómo le sacaban a la luz distintos tweets donde aceptaba su amor por el Real Madrid.

El mexicano nunca se ganó la confianza de la hinchada, quien cada que podía, le recriminaba su gusto por los 'merengues'. Su bajo nivel y su pasado, acabaron por cobrarle factura y dejarlo fuera del cuadro de Simeone.

En el caso de Carlos Vela, también habría que sumar el poco interés que tendría en llegar a un club donde de entrada será banca. Podría aceptarlo si le emocionara a un nivel superlativo jugar en el club, pero como tampoco lo mata la idea, es probable que siga prefiriendo ser figura de la Real Sociedad donde es amado y querido en el club, idolatrado por la afición y donde ama el clima y la comida de San Sebastián lo han hecho ya rechazar otras opciones que deportivamente, son mejores.

Así que si Barcelona llega a insistir en fichar a Carlos Vela, deberá aceptar que lleva a un futbolista extraño que encima ha aceptado públicamente su gusto por el Real Madrid. Ganará un enorme jugador, pero también tendrá que aceptar que es un tipo que valora muchas cosas más allá de estar en un club de futbol, sea grande o no.