La historia de Drake y Coachella no es precisamente una relación ejemplar entre un artista y un festival, ambos de las proporciones masivas que presumen: aunque lo han intentado, simplemente no pueden ignorarse. La primera aparición grande en un festival por parte del rapero de Toronto fue en la edición 2015 de Coachella y pasará a los anales de la historia gracias a la dispareja calidad de su set, y pero sobre todo por el infame cameo de Madonna. Ahora otro conflicto se une a la lista, con Drake (que estuvo en Indio, California el fin de semana) acusando al Madison Club de discriminación racial el día de ayer domingo, en un post de Instagram que en realidad ya borró.
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De acuerdo a TMZ, una cuenta que tal vez pertenecía al Madison Club respondió al post original de Drake en los comments, disculpándose por "el inconveniente" y diciendo que iban a investigar el asunto.Actualizaremos este post conforme haya más información disponible.El lugar más ofensivo en el que me he quedado en mi vida, con su personal eligiendo quién se queda en dónde, basados en perfiles raciales.