Roberto Mancini denuncia "la homofobia y el racismo" del entrenador del Napoli

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El entrenador del Inter de Milán, Roberto Mancini, denunció el pasado martes "la homofobia y el racismo" del técnico del SS Napoli, Maurizio Sarri, tras el partido de Coppa Italia que enfrentó a ambos equipos en el estadio San Paolo de Nápoles. Según Mancini, Sarri le habría llamado "maricón" en un encontronazo que tuvieron los dos entrenadores hacia el final del encuentro.

Según la declaración de Mancini, el técnico del Inter se acercó al cuarto árbitro para preguntar cuánto tiempo iba a añadir cuando Sarri se dirigió a él llamándole "frocio" y "finocchio" ("maricón"). Mancini después aseguró a la prensa que Sarri se había disculpado en el vestuario, pero que "debía avergonzarse" y que "hombres como él no deberían estar en el fútbol".

Sarri, por su parte, pidió perdón y aseguró que se había puesto nervioso con la expulsión de Dries Mertens. El entrenador napolitano —que podría ser sancionado con hasta 4 meses de suspensión por los insultos— afirmó en un principio que "no se acordaba" de lo que había dicho, y que tanto podría haberle llamado "maricón" como "democristiano" (?).

Domanda Rai: "Lei conferma di aver dato dell'omosessuale a Mancini?". #Sarri: "Non ricordo, potrei avergli dato anche del democristiano".
— nonleggerlo (@nonleggerlo) 19 Gennaio 2016

La polémica saltó rápidamente a Twitter, donde se produjo un intenso debate bajo el 'hashtag' #SarriMancini. Cabe mencionar que no es la primera vez que el entrenador del Inter se ve envuelto en un escándalo de este tipo: en 2007, Roberto ocupó exactamente la posición contraria a la que exhibe ahora cuando en San Siro aparecieron pancartas racistas en un partido precisamente frente al Napoli.

En esa ocasión, Mancini disculpó las pancartas —en las que se podían leer, entre otras lindezas, "napolitanos tuberculosos"— asegurando que "eran burlas y no racismo" y que los periodistas "se las daban de falsos moralistas".

El Inter venció 0-2 al Napoli en San Paolo y se clasificó para las semifinales de la Coppa Italia, pero por desgracia el fútbol pareció lo de menos.

Pobre Serie A.