Tres generaciones de Muay Thai: Sasiprapa Gym

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Tres generaciones de Muay Thai: Sasiprapa Gym

El gimnasio Sasiprapa celebra su 50 aniversario, y es uno de los más antiguos de Bangkok.

Fotos por Matthew Yarbrough

Como con la mayoría de los gimnasios, escuchamos el ruido de Sasiprapa antes de verlo, escondido en un callejón en el distrito Bang Kapi en Bangkok. Un vendedor de helados nos apuntó en la dirección correcta. "Caminen junto al canal, den la vuelta a la izquierda en la mezquita y sigan caminando", nos dijo.

El viaje a través del pueblo nos había quitado mucho tiempo, pero al menos no había tráfico. Los canales estaban vacíos, con los pasajeros de los botes empujándose para hacer espacio, moviéndose en compás con las olas del río, moviéndose hacia el centro del bote haciendo espacio para los demás pasajeros. Fue un alivio desembarcar en el Muelle Wa Klang, bajándonos de un bote en la hora pico para caminar a diez minutos del gimnasio.

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Sasiprapa estaba abarrotado, con peleadores por todos lados —golpeando manoplas o costales, levantando pesas, corriendo afuera. Monitoreando la actividad estaban padre e hijo, Thakoon y Ratkamphon Ponsupha, dos tercios de la dinastía Sasiprapa.

En el circulo natural de vida de los gimnasios de muay thai en Tailandia, pocos campamentos sobreviven más de una generación. Muchos terminan después de un par de años o décadas, por lo general cuando el fundador pierde el interés o fallece. Sasiprapa, sin embargo, cumple 51 años este año, establecido en 1965 por Chanai Ponsupha, soldado del ejército tailandés. Ahora el hijo de Chanai, Thakoon, es el jefe, criando a su hijo Ratkamphon, mejor conocido como Arm, para ser su sucesor.

"Mi abuelo adoraba el muay thai", dice Arm cuando le preguntan por qué creó el gimnasio. "Todos en el estadio lo conocían", aunque Chanai peleó pocas veces. En su primer gimnasio, el pequeño Suan Miskwan, Chanai construyó su fama creando campeones de muay thai. Luego su gimnasio consiguió patrocinios y su nombre actual es en honor a otro soldado del ejército, el General Arradej Sasiprara. El gimnasio se mudó a un espacio más grande, siguió formando campeones que pasaron a convertirse en medallistas olímpicos en boxeo.

El hijo de Chanai, Thakoon continúa con el éxito de su padre. Cuando le preguntan cuántos campeones ha formado el gimnasio, Arm, hijo de Thakoon, hace una pausa para contar con los dedos. "No estoy seguro de cuantos, pero son muchos", dice. Estima que "nueve o diez tailandeses, y cuatro o cinco campeones extranjeros".

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Los peleadores extranjeros son una gran parte de Sasiprapa. El gimnasio está abierto a entusiastas o personas que quieren entrenar poco, pero está lejos de ser como los "campamentos vacacionales de muay thai" que existen en otras áreas de Tailandia. Sasiprapa por lo regular organiza peleas para sus peleadores activos, como la peleadora griega y dueña de gimnasio, Fani Peloumpi, quien recientemente ganó una pelea estelar contra Nong Am en el Festival Anual Wat Santai en Chiang Mai.

Parte de la popularidad de Sasiprapa con los peleadores internacionales se debe a la historia de su dueño Thakoon en el extranjero. Thakoon pasó años en los Estados Unidos, "trabajando y estudiando" como dice su hijo Arm, antes de regresar a Tailandia para ayudar a su padre a expandir el negocio familiar en los 90. Arm dice que la fama internacional del gimnasio se debe a la habilidad de su padre para comercializar el gimnasio en Internet en inglés, así como la presencia del gimnasio en promotoras en el extranjero.

"Cuando mi padre regresó de Estados Unidos, comenzó a promocionar el gimnasio a través del sitio web", dice Arm. "Y los extranjeros comenzaron a llegar ya que tenemos presencia en todo el mundo. Peleamos en los Estados Unidos, Japón, Irlanda y nos ven ganar".

Arm reporta un total de 25 o 30 peleadores extranjeros entrenando actualmente en Sasiprapa, un gran número comparado con los "seis o siete" peleadores tailandeses residentes. Agreguemos a eso los cinco entrenadores tailandeses, quienes son expeleadores originarios de Isaan o el sur de Tailandia, y tenemos una población total fluctuando entre 40 o 50 en el gimnasio, dependiendo cuantos niños del vecindario vayan a entrenar.

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Sasiprapa no es grande, y albergar tantos peleadores puede ser todo un reto. "Con extranjeros, a veces hay tantos que tienes que organizar a los que sostienen las manoplas, asegurarte de que todos tengan un turno en las manoplas", dice Arm.

Pero el número de estudiantes es bueno para el negocio. Arm planea comprar una casa vecina para expandir el gimnasio. "Queremos hacer otro ring, poner más tatamis, y construir una casa para los peleadores extranjeros", dice. Los entrenadores y peleadores tailandeses viven en el gimnasio, pero sólo pueden albergar dos o tres peleadores extranjeros, algo que la administración espera cambiar.

La fortaleza de Sasiprapa depende de la dinastía familiar: Chanai construyó los fundamentos, Thakoon es un hombre de negocios que está haciendo crecer el gimnasio, y su hijo Arm está demostrando ser rápido para aprender. Con una licenciatura en negocios, Arm quiere convertirse en promotor, siguiendo los pasos de su padre, quien organiza peleas en estadios grandes en Bangkok. Arm es cercano a otro hijo de una dinastía del muay thai, se refiere a Boat Yindee de Petchyindee como su hermano. "Le pido consejos sobre cómo dirigir el gimnasio", Arm ríe. "Es bueno, me da muchos consejos". Arm, de 24 años de edad estima que estará listo para organizar eventos propios en tres o cuatro años.

Mientras la siguiente generación de la familia Ponsupha aprende el negocio familiar, Thakoon mantiene la creación de su padre con vida. "Es conocido como uno de los mejores cinco gimnasios en Bangkok", dice. Y juzgando por la manera en que lo dice, aunado al trabajo que él y su familia dedican, esta familia del muay thai planea mantenerlo así.