Fotos por Santiago Sepulveda.Van dos día de Rock al Parque y miles de personas han pasado por los tres controles del ingreso, han tenido que sacarse los zapatos y pasar por el sensual toqueteo de la fuerza pública. Y así, muchos han entrado victoriosos a ese campo de batalla que es el Simón Bolívar. Muchos otro han tenido que dejar sus corotos en las bolsas de basura que la Policía usa para botar todas las porquerías que encuentra en los bolsillos de todos ustedes.
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Fuimos a la fila y metimos las manos (sin guantes) a esas hediondas y húmedas bolsas, para ver algunos tesoros perdidos, como pipas y encendedores que no volverán a brillar, uno que otro objeto corta punzante y algunas cosas que todavía no nos explicamos por qué diablos alguien intentó meter al festival.
¿Un bisturí y un destornillador? Qué putas.
¿Quién tiene fuego?
Chao a lo fierros
Adiós pipas ahora volarán con los ángeles.
Por si se le pega a la tuerca.
Esto es un kit de belleza no sabemos por qué lo decomisaron.
Uno ya no se puede cortar el pelo en Rockal Parque.
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