1) Los jóvenes deberían soñar con todas sus fuerzas, pero teniendo siempre presente su mortalidad y valorar así si merece la pena correr según que riesgos.
2) Es bueno que los jóvenes tengan una ambición insaciable, siempre y cuando esa ambición responda a una serie de valores éticos y morales.
3) Los jóvenes no deberían perseguir sólo cosas materiales que solo satisfacen su cuerpo sino también cosas del alma que sean buenas para la mente y den alegría al corazón.
4) Respeta a tu familia, amigos y vecinos como te gustaría que te respetaran ellos a ti.
5) Por encima de todo, buscad el amor. El amor ha sido, es y será siempre la respuesta.