35 rechazos que te llevarás a tus veintitantos

Con esta serie de rechazos tal vez te sentirás identificado… por lo menos con uno de ellos. Lamentablemente, es complicado que a una persona le pasen 35 cagadas que nos resulten interesantes a todos. Tranquilo, hicimos una lista que nos haga sentir a todos como en casa: 35 rechazos que te llevarás a los veintitantos. Muchos los recordarás con escalofríos, te reabrirán viejas heridas del pasado; otros, todavía no habrás llegado a sufrirlos, pero lo cierto es que (en la mayoría de los casos) todos los seres humanos pasamos por las mismas situaciones ridículas.

1. No cumples los requisitos (o no te alcanza la plata) para entrar a la universidad que querías

Este será tu primer gran rechazo importante. Seguramente a esas alturas ya habrás sufrido alguno, como la vez que tu mamá te organizó una fiesta de cumpleaños y nadie fue, o cuando le mandaste esa carta a la niña / el niño "perfecto" y luego la encontraste rota en la caneca del salón. Pero los rechazos verdaderamente importantes no llegan hasta que te acercas a los viente: cuando estás perdido y a la deriva en ese lugar horrible llamado vida real. Lo más probable es que te rechacen de una o dos universidades. La rabia se te pasará pronto… En ese momento de tu vida sólo te importará la cantidad de veces que tengas sexo, lo que vas a comer por la noche y por qué tu internet no funciona.

2. Me estoy preocupando porque no creo que llegue al número 35.

3. Juguemos a

4. escribir

5. esas

6. respuestas de

7. pocas palabras

8. que tanto

9. nos gustan.

10. Rechazado de una discoteca

Como no notarás la presión de tener que darlo todo en los estudios (porque la universidad no es tan dura como la pintan), saldrás de fiesta todos los días. Eres joven y bello. Durante tu primer año, habrás salido más que todas las hermanas Kardashian juntas. Pero llegará el día en el que lo echarás todo a perder. Un día te encontrarás con esa persona que te encanta, le preguntarás cualquier estupidez para entablar conversación, la cosa se pondrá cada vez más tensa (sexualmente hablando) y acabarás follando en el baño. ¿El único problema? Lo más seguro es que te coja el de seguridad y te prohíba la entrada durante un tiempo (hasta que se le olvide o te tiñas el pelo).

11. ¿Seguimos

12. con pocas

13. palabras?

14. Rechazos laborales

Después de sufrir los latigazos del rechazo en tu educación y en tu alcohólica vida adolescente, llegará el momento en el que te des cuenta de que tienes que dejar de trabajar en un call center. Entonces, le dirás a alguien que te ayude a hacer tu hoja de vida llena de mentiras y experiencias poco impresionantes. La enviarás a decenas de empresas. Por unas horas te sentirás como si fueras a volverte rico y comenzarás a imaginar qué hacer con todo el dinero que vas a ganar. Después, no volverás a oír nada de las tantas aplicaciones de trabajo que enviaste y te darás cuenta de que tal vez no deberías haber renunciado tan temprano al call center.

15. Rechazos "laborales" (en trabajos que no te pagan)

Después de todos esos rechazos, será tiempo de que tengas una "crisis existencial" temprana. No tendrás ni idea de qué hacer con tu vida y te tocará soportar las preguntas incómodas de tus tíos en las comidas familiares mientras presumen de su hijo "el abogado". Sin embargo, esta etapa no durará tanto como parece. Llegará el día en el que tendrás una epifanía y descubrirás que tu verdadera vocación es ser editor/actor/curador/estilista, o básicamente cualquier cosa que no involucre análisis de datos o un sueldo fijo.

Mandarás tu hoja de vida a todas las publicaciones que admiras con el fin de empezar tu prometedora carrera como practicante, pero una vez más nadie te contestará. ¿La razón? Ellos tampoco ganan lo suficiente como para pagarte el mínimo al mes por hacer cafés y limpiarles el sudor. Pero no te preocupes… con el tiempo estarás muy agradecido de NO haber recibido respuesta.

16. De ahora en adelante me voy a saltar todos los números pares…

25. No sé qué pasó, pero creo que perdí unos cuantos "rechazos".

27. Es por salud mental colectiva :)

29. Rechazado por tus amigos

En este punto de tu vida, estarás atrapado en un trabajo aburrido, e incluso degradante, y tu vida girará en torno a un círculo de cansancio, aburrimiento, hambre, culpa, aburrimiento, platos precocinados, sueño… Ya quedan muy pocos rechazos para llegar a la espeluznante realidad de la edad adulta. Un rechazo muy común, y por el que todos de una u otra forma pasamos alguna vez, es ser rechazado por el parche de amigos.

Un día estarás con ellos tomando guaro en un sofá incómodo de alguna casa, discutiendo sobre cualquier cosa y te dirán que te adoran… Al día siguiente te enterarás de que se han ido de vacaciones a Cartagena sin ti y estarás en tu casa solo comiéndote una pizza mientras te preguntas qué has hecho mal. Te han marginado del grupo. Quizá es porque te acostaste con demasiados miembros del parche; quizá, porque no tienes Facebook; tal vez, porque ahora eres muy aburrido. No importa el porqué: el caso es que no les importas y ya no quieren que vayas con ellos. ¿Y qué? ¡Que se jodan!

33. Shhhh

35. ¡La logramos!

La vida estará llena de rechazos por parte de muchas personas que pensabas formarían parte de tu vida para siempre… Pero no vale la pena profundizar en eso porque te va a pasar millones de veces. Seguramente te rechazarán en las galerías de arte porque no entienden tu visión, de las invitaciones a almorzar porque te volviste vegetariano o de la clase de yoga porque no te apuntaste en la lista de asistentes. Todo eso es transitorio y banal. Tienes que aprender a calmarte y prepararte para el más duro: El divorcio. ¡Nos vemos en los juzgados!