Si hay una ciudad que necesita un empuje económico en este momento es Kabul, Afganistán. Afortunadamente, el gobierno afgano sabe con qué arreglarlo: con un estadio nuevo de $270 millones de dólares. Con ese precio, Afganistán aún tendrá el 60% de su PIB anual disponible para gobernar al país. ¡Qué ganga!El proyecto, en el mejor de los casos, suena dudoso. De acuerdo con varios sitios que reportaron la aparición en la radio de la cantante afgana Muzhda Jamalzada, la vocera del proyecto, el estadio será financiado por el apoyo de "famosos atletas estadounidenses" como Muhammad Ali. Se rumora que el gobierno estadounidense ya aprobó el plan.Parece que quien sea que esté a cargo de todo esto —sigue siendo una incógnita— hará un tour mundial para recaudar fondos para el estadio, así que prácticamente todo lo relacionado con el proyecto permanece en duda. Sin embargo, no creo que vaya a ser un problema recaudar el 40% del PIB de un país con donaciones cuando dicha nación está clasificada en el cuarto peor lugar del índice de corrupción de Transparency International.También se dice que la cantante aseguró que el proyecto incluirá "otros proyectos de desarrollo como hospitales, escuelas y clínicas de salud con el avalo de los expertos donde no solo se crearán empleos y oportunidades de trabajo, sino también ayudará a Afganistán a albergar competiciones deportivas internacionales." ¿Utilizar un estadio como una herramienta engañosa para el crecimiento económico? Tal vez el gobierno afgano está más apegado a Occidente de lo que creíamos.