¿De verdad creyeron que los Cavs no aplastarían a los Raptors?

Tal vez hayas pensado que este sería el año que los Cavaliers de Cleveland quedarían eliminados en la primera ronda de postemporada. Después de un final abismal en la campaña regular y un lugar relativamente bajo en playoffs (sembrado 2), quizá llegaste a contemplar la posibilidad de verlos tropezar ante los aguerridos e infravalorados Raptors de Toronto. Pero el destino tenía otro plan para LeBron James y su empresa. De hecho, después de la paliza que los dinosaurios se llevaron en el Juego 1 y 2, debiste estar ebrio para haber apostado a favor de Toronto.

Es difícil decir con precisión por qué fue tan brutal este partido —DeMar DeRozan y Kyle Lowry no son jugadores cualquiera—pero los Raptors se vieron superados en todos los sentidos. ¿Acaso necesitan otro ejemplo además de los primeros dos partidos?

Los Pacers de Indianan de Paul George y su perímetro decente le dieron más batalla a los Cavs. Cierto, los Cavs también los barrieron, pero sólo por un margen promedio de cuatro puntos por partido. El margen promedio de victoria contra los Raptors fue de 15.25 puntos. La directiva de Toronto debe haber tenido pesadillas.

Basta ver cómo se lucían los Cavs en patio ajeno:

LeBron terminó la serie como la primera persona en anotar, mínimo, 30 puntos por partido en seis juegos de postemporada consecutivos desde la marca establecida por Kobe en 2010. En algún punto los partidos se convirtieron en receptores de estadísticas más que una serie de playoffs.

Es difícil saber si el equipo número 1 de Este, los Celtics, tienen oportunidad alguna para derrotar a los sólidos Cavs en la siguiente ronda o si los Wizards tienen chance de superar en tiros a Cleveland con John Wall en el perímetro. Pero hasta el momento, mientras los Cavs toman un largo descanso al mismo tiempo que sus rivales se matan en la duela, todo parece indicar que la manera más segura de invertir tu dinero es apostando por los Cavaliers.