Así nació la historia del “Al Mundial no vamos, pero a México le ganamos”

Futbolísticamente, México ha dejado desde hace tiempo de ser el 'Gigante de la CONCACAF'. Más allá de ser campeones de la región, el propio crecimiento de los equipos de la zona, sumado a sus ganas de vencer al Tri, han hecho que la selección azteca pierda terreno. Sin embargo, si en algo aún se tiene el 'privilegio' de ser la gran cabeza de la Confederación, es en el tema de odio hacia los colores verde, blanco y rojo.

México vive pesadillas en Centroamérica. Lo hace por la gran hostilidad que sufre cada que le toca disputar una eliminatoria mundialista en aquellos lares. Recibe de todo, desde insultos y provocaciones, serenatas, malas condiciones del campo en horarios fatídicos para jugar un partido, falta de aire acondicionado en los vestidores e incluso ataques al himno nacional. Es algo, que poco a poco, el futbolista azteca ha entendido y se ha acostumbrado.

Entre toda esa historia de enemistades y odios, existe un dicho muy particular que se dio por vez primera en la eliminatoria rumbo a Estados Unidos 1994 en una visita del Tri al temido Cuscatlán de El Salvador: "Al Mundial no vamos, pero a México le ganamos".

Aquella celebre frase que se inauguró en aquella ocasión, ha sido reproducida en otros campos y en otros países por los mismos clubes de CONCACAF quienes dan la vida por vencer y arrodillar a México pese a que al final, el equipo azteca asista al Mundial y ellos no.

Aquel duelo disputado el 4 de abril de 1993 venía precedido de varias situaciones. La inolvidable frase que en Centroamérica jugaban con balones cuadrados, cortesía de Fernando Marcos, aún calaba en un país futbolero como El Salvador. Vencer al supuesto 'Gigante', el soberbio y prepotente México era una tarea obligatoria para la 'selecta', que en aquel entonces gozaba con una de las mejores generaciones de futbolistas que han tenido, lidereados por supuesto, por el gran e histórico Jorge 'Mágico' González.

Además de ser el arranque eliminatorio, México disputaría nuevamente un partido de fase previa a un Mundial, el último, curiosamente, lo había jugado en Honduras contra Haití, los 'catrachos' y El Salvador, quien lo había eliminado de España 1982. El Tri calificó directamente a la Copa del Mundo del 86 y no disputó algún choque eliminatorio para Italia 90 por el caso de los 'cachirules', Así, el reencuentro tendría un gran morbo y enorme motivación para los 'cuscatlecos'.

Finalmente, aquel encuentro marcaba el debut oficial de Miguel Mejía Barón como entrenador de México tras la salida del argentino César Luis Menotti. En tierra azteca, existía gran presión por ganar en este partido, y así lo dejó en claro Hugo Sánchez al sostener que "ni por accidente perderemos en el Cuscatlán".

La frase de 'Hugol' caló hondo, y en ese instante, la afición salvadoreña inauguró en los medios de comunicación, días previos a ese partido el "Al Mundial no vamos, pero a México le ganamos". Aquel día, en el sector de sol, una gran manta con aquellas palabras engalanaba la vieja estructura del estadio Cuscatlán.

Y así fue. El Salvador le acabó ganando a México aquel partido por marcador de 2-1. Un juego que se dio ante el inclemente calor de un partido disputado a las 12:00 pm, y en el cual, el Cuscatlán se había llenado desde las 8:00 am para hacer sentir la localía a su equipo, y su odio al Tri.

Previo a arrancar el partido, cuando se entonaban los himnos nacionales, el audio del estadio Cuscatlán falló justo en el instante que sonaba el himno nacional mexicano, todo, ante la molestia de jugadores aztecas que, muymolestos, cuestionaban el por qué de aquella falta de respeto.

El encuentro lo inició ganando El Salvador con un polémico penal convertido por Carlos 'Papo' Castro tras una mala decisión del colombiano Armando Pérez Hoyos. Faltando 15 minutos, Alberto García Aspe marcó un golazo que igualó el marcador y silenció el Cuscatlán, sin embargo, dos minutos más tarde, William Renderos venció a Jorge Campos para el 2-1 definitivo.

Aquella fue, la primera ocasión que El Salvador vencía a México como local en un partido oficial. Las calles de la capital se inundaron de fiesta, carros en las calles, banderas mexicanas quemadas y la eterna burla del triunfo sonrojaban las miradas cuscatlecas ante un Tri que iniciaba de la peor forma posible el camino hacia Estados Unidos 94.

"Al Mundial no vamos, pero a México le ganamos". También, así fue la historia. El Salvador perdió cuatro encuentros consecutivos, tres como visitante y uno como local quedando fuera de la pelea por el boleto a Estados Unidos.

Incluso, en aquellos encuentros como local ante Canadá y Honduras, la afición prácticamente abandonó a su selección en el Cuscatlán, nada que ver al ambiente que se mostró en aquel encuentro contra México.

De la misma manera sucedió la historia en las eliminatorias rumbo a Sudáfrica cuando El Salvador venció 2-1 a México nuevamente, otra vez en el Cuscatlán, aunque al final, el Tri fue al Mundial y los jugadores de la 'selecta' quedaron fuera de toda posibilidad para ir a la Copa del Mundo africana. A los centroamericanos les quedará el dulce triunfo ante el Tri que a la postre, no les sirvió de nada.