¡Bravo Diagonal! Habéis superado todas las portadas de La Razón

"Nuestra nueva portada puede levantar ampollas, imagínate lo que hay dentro. El jueves en la calle." ¿Lo dices en serio, Diagonal? ¿De verdad piensas eso, periódico anticapitalista al servicio de los movimientos sociales de izquierda? No sé, viendo lo que nos mostráis por fuera, dudamos que lo que ofrecéis dentro pueda tener ningún interés real. Sinceramente, esta portada que nos enseñáis levanta -como muchísimo- las mismas ampollas que esos pijos rebeldes que gritan "que me chupes la polla" cuando suena Killing in the name en el bar. No, espera, levanta exactamente las mismas ampollas que Miguel Bosé cuando escribió una canción protesta y la llamó Sí se puede .

Ni siquiera nos atreveríamos a calificar esto de cebo, porque probablemente nadie acuda mañana al quiosco con dos euros y treinta céntimos, pidiendo un ejemplar del diario con los ojos en blanco, hipnotizados por ese dibujo de un tipo metiéndose una raya (de encuesta) junto al titular CIUDADANOS SE VIENE ARRIBA. Bea de Gran Hermano en tetas con la gorra de la legión. Juan Carlos cediendo una corona llena de mierda a su hijo Felipe bajo el titular "El Rey abdica"… Eso son cebos. Pero entended esta aclaración como humildísimo consejo, no como crítica, porque desde aquí aplaudimos que hayáis superado en un solo día todo lo que ha hecho La Razón desde 1998. Apostar por el humor burdo y arrojar cualquier credibilidad por el váter a cambio de que hablemos un rato de vuestra publicación es, sin duda, una exhibición de agallas.

Pablo Iglesias opina sobre las posibles adicciones de Albert Rivera.

Lo que ha dibujado 'Pincho' -el nombre de este ilustrador no deja lugar a dudas: mordaz, ácido, con aguijón- es bueno, pero se puede mejorar. La lluvia de confeti, el gorrito de cumpleaños y los gemelos de oro tienen punch pero, estirando el chicle de lo obvio, ¿por qué no tirar la casa por la ventana pintando un señor gordo con traje, chistera y fumando un puro? El arquetipo de villano enemigo de la izquierda. Y subrayar todavía más el cliché de político farlopero, el topicazo del yuppie, el JASP (si eres joven, búscalo en Youtube), afirmando en el pie de foto que "en este país sólo se meten coca los liberales agresivos". Si necesitáis un estudio científico en el que apoyar esta tesis os aseguramos que a nadie de esta oficina, ni a nuestros amigos ni, por supuesto, a ningún familiar cercano, se le ha pegado nunca jamás nada blanco en el bigote.

Normalmente los chistes sobre droga no nos hacen gracia. Preferimos a la gente que se mete de todo sin molestar, que a los fanfarrones que cada vez que pillan pastillas lo cuentan en voz alta como niños pequeños con su primer pitillo. Pero, oye, la pantomima de Monedero el otro día frotándose la nariz para burlarse del líder de Ciudadanos y lo de esta portada de Diagonal son otra cosa. Son como los que les llaman Cuñadanos (o Cocadanos). Son el ejemplo perfecto de cómo agarrar la anécdota intrascendente en vez de lo realmente importante. Una jugada maestra que no entendemos del todo, pero que creemos que consiste en pasar por alto los posibles tejemanejes de El País con las encuestas de Metroscopia para favorecer a Albert Rivera de cara a las elecciones del 20D y concentrar todas las fuerzas en ponerse a la altura de la derecha más rancia y ridícula. ¡Bravo Diagonal!