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Alguien se robó el tributo de Banksy a las víctimas del tiroteo en el Bataclan de París

El stencil fue sacado del local de música donde 90 personas perdieron la vida en un ataque en 2015.
Un hombre fotografía el mural robado de Banksy en el Bataclan de París.
Foto por Thomas Samson / Getty Images

Artículo publicado originalmente por VICE Estados Unidos.

El viernes por la noche, un grupo de ladrones descendió de una camioneta en el club Bataclan y robó el tributo de Banksy a las víctimas de los ataques terroristas de 2015 en París, informó Reuters.

El stencil, que mostraba a una mujer sombría con un pañuelo en la cabeza, ha sido retirado por completo de la salida de emergencia contra incendios de la sala de conciertos. Fue una de las muchas piezas que el artista publicó en su cuenta de Instagram —su manera de autenticar públicamente sus obras— durante su residencia en el verano de 2018 en la capital francesa, informó el New York Times. El Bataclan anunció el sábado por la mañana en Twitter que el stencil había sido robado.

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Lamentablemente, robar obras de Banksy y venderlas por grandes cantidades de dinero es bastante común. Su trabajo es despegado de las paredes o, en muchos casos, desmontado de las fachadas de concreto o ladrillo, y se vende a coleccionistas privados por más de 1 millón de dólares. Las versiones recuperadas y restauradas de su obra pueblan innumerables exposiciones y subastas de arte no autorizadas en todo el mundo, desde Roma hasta Toronto. En 2014 se inauguró una exposición de obras no autorizadas del artista en Londres para una exhibición literalmente titulada Stealing Banksy, algo que el artista consideró "repugnante".

Estas colecciones no autorizadas a menudo son compiladas por instituciones adineradas como La Fundación Cassa di Risparmio di Modena, un banco que fue el centro de las protestas del artista italiano Blu, quien destruyó todas sus obras de arte en la ciudad de Bolonia para evitar que los ladrones las vendieran a los coleccionistas. Además de subvertir la intención del artista, las exhibiciones no autorizadas también pueden ser un riesgo para la seguridad, como ha sido demostrado por el tipo que sustrajo una impresión de Banksy de 45,000 dólares de una exhibición en Toronto.

Para ser justos, el concepto de propiedad es confuso cuando se trata del arte callejero, pero lo que sí es claro es para quién estaba dedicado el mural del Bataclan, lo que hace que este robo sea particularmente atroz. Como escribió el club en Twitter, "La obra de Banksy, un símbolo de la memoria que le pertenece a todos: residentes, parisinos, ciudadanos del mundo, nos ha sido arrebatada".

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