Foto por página oficial de la Marina de los EE. UU. vía Flickr.
Artículo publicado originalmente por VICE Australia.Una mujer en Nueva Zelanda fue a donde una acupunturista con una lesión en el brazo y la muñeca y se fue con dos pulmones perforados. La joven de 33 años acudió a su cita en marzo de 2018, le dijo a la practicante que tenía dolor en el área del cuello y los hombros, y fue tratada con agujas insertadas en los puntos de jian jing, ubicados en la parte superior de los hombros. Más tarde esa noche, se encontraba en la sala de urgencias del hospital local.Stuff informa que la mujer expresó dolor cuando las agujas entraron y dijo que sentía que estaban "extremadamente profundas". Se las dejaron adentro durante treinta minutos y, según los informes, la acupunturista les dio vuelta antes de sacarlas. Cuando fueron retiradas, la mujer dijo que sintió un dolor repentino en el lado derecho de su pecho y experimentó dificultad para respirar. Cuando se fue del lugar a las 2:30 pm, se sentía "muy incómoda".
En la noche, el dolor continuó en el costado del pecho así que el esposo de la mujer la llevó a un centro médico. De ahí fue trasladada a un departamento de emergencias local. Finalmente fue diagnosticada con dos pulmones perforados.El Comisionado de Salud y Discapacidad neozelandés, Anthony Hill, sentenció que la acupunturista violó el Código de Salud y Derechos de los Consumidores de los Servicios de Discapacidad al no informarle a la paciente que había riesgo de neumotórax, es decir, colapso pulmonar, ni pedirle que firmara un consentimiento escrito antes de realizar el procedimiento riesgoso. Recomendó que la practicante continúe con la capacitación sobre técnicas de punción con acupuntura y que presente a la Comisión evidencia de que la ha completado.En respuesta, la acupunturista dijo que "sentía mucho" haber ocasionado un colapso pulmonar en la paciente. Se cree que el bajo índice de masa corporal de la paciente, que pesaba 45 kilogramos, puede haber aumentado el riesgo de complicaciones.Según los informes, la paciente todavía sufre los efectos de la punción.Sigue a Gavin en Twitter o Instagram.
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En la noche, el dolor continuó en el costado del pecho así que el esposo de la mujer la llevó a un centro médico. De ahí fue trasladada a un departamento de emergencias local. Finalmente fue diagnosticada con dos pulmones perforados.El Comisionado de Salud y Discapacidad neozelandés, Anthony Hill, sentenció que la acupunturista violó el Código de Salud y Derechos de los Consumidores de los Servicios de Discapacidad al no informarle a la paciente que había riesgo de neumotórax, es decir, colapso pulmonar, ni pedirle que firmara un consentimiento escrito antes de realizar el procedimiento riesgoso. Recomendó que la practicante continúe con la capacitación sobre técnicas de punción con acupuntura y que presente a la Comisión evidencia de que la ha completado.En respuesta, la acupunturista dijo que "sentía mucho" haber ocasionado un colapso pulmonar en la paciente. Se cree que el bajo índice de masa corporal de la paciente, que pesaba 45 kilogramos, puede haber aumentado el riesgo de complicaciones.Según los informes, la paciente todavía sufre los efectos de la punción.Sigue a Gavin en Twitter o Instagram.
