Música

Algunas bandas cambiaron sus nombres ofensivos de manera racial. ¿Quién es el siguiente?

No importa cuán leve sea la relación del nombre de una banda con la esclavitud en Estados Unidos, ahora es momento de cambiarlo.
Drew Schwartz
Brooklyn, US
ÁG
traducido por Álvaro García
The Chicks
Foto cortesía de The Chicks

Artículo publicado originalmente por VICE Estados Unidos.

Dos semanas después de que el trío de country-blues Lady Antebellum se convirtiera en "Lady A", distanciándose de las connotaciones históricamente racistas del término antebellum, las Dixie Chicks también cambiaron su nombre. El jueves pasado, Natalie Maines, Emily Strayer y Martie Maguire retiraron la palabra "Dixie": otro término que romantiza el Sur estadounidense de la época de la Guerra Civil.

Publicidad

Mientras que muchos fans mostraron su apoyo al cambio, otros han argumentado que "Dixie" no es más que una designación regional que "no tiene que ver con conceptos de esclavitud o raza", un apodo sureño inofensivo utilizado para describir su tierra natal sin ninguna malicia subyacente. Según su argumento, es una cuestión sureña: si no eres de aquí, no lo entenderías.

Algunos historiadores creen que "Dixie" se deriva de la Línea Mason-Dixon, que separó a los estados libres de los estados que apoyaban la esclavitud durante la Guerra Civil. Otros creen que provino del billete francés de 10 dólares que circuló en Louisiana antes de la guerra, conocido como "dix". Independientemente de cómo surgió el término "Dixie", el hecho es que hace referencia a un momento y un lugar de Estados Unidos donde las personas negras fueron esclavizadas.

Nací y crecí en Atlanta; incluso entre los sureños podrías pasar toda una vida discutiendo sobre la palabra "Dixie" —su debatida etimología, la evolución de su connotación como un término de orgullo entre algunas personas que aseguran que no es nocivo— y si es "correcto" o "incorrecto" que The Chicks eliminen la palabra de su nombre. Es un argumento que está desarrollándose en este momento en Twitter y probablemente continúe durante algunas semanas. Pero al final del día, sin importar de qué lado estés, The Chicks siguen siendo The Chicks; la gente que quiere usar el término "Dixie" lo seguirá usando; y todos habremos perdido nuestro tiempo en una discusión que realmente no es el problema en cuestión. El problema real aquí —ya sea que se trate de nombres de bandas, estatuas confederadas o la bandera rebelde— es este: los negros fueron esclavizados durante más de 200 años en Estados Unidos y continúan siendo discriminados por un sistema social, judicial y carcelario impregnado por la supremacía blanca. La pregunta no es si las bandas cuyos nombres tienen vínculos con la esclavitud deberían cambiárselo. Mas bien habría que cuestionarnos: ¿estamos comprometidos a mirar nuestra horrible historia a los ojos, admitiendo que nos llevó a un lugar en el que las personas negras en Estados Unidos siguen siendo maltratadas sistemáticamente y estamos haciendo todo lo posible para arreglarlo?

Publicidad

Si la respuesta a esa pregunta es sí —y debería serlo— entonces la respuesta a la primera pregunta se vuelve simple. Cambien los nombres.

Además de Lady A (quien, vale la pena señalar, está usando el nombre de una músico negra que lo había usado durante años) y The Chicks, la banda de rock sureña Confederate Railroad, la banda de punk noruega Turbonegro y la banda de hardcore de Sacramento Slaves* usan nombres desconsiderados de manera racial, para dar solo algunos ejemplos. Esto debe terminar. No importa cuán leve o significativa sea la connotación del nombre de una banda a la esclavitud en Estados Unidos, si estamos realmente comprometidos a contar esa historia y todo lo que ha generado, deberíamos eliminar todo lo que intente glorificarla, anestesiarla o normalizarla.

Es comprensible que una banda con un nombre insensible con la percepción racial pueda dudar en cambiarlo. Es por lo que sus fans los conocen; es sobre lo que han construido sus carreras; es a lo que se han apegado emocionalmente durante años. En la superficie, podrían parecer razones justas y bienintencionadas para quedarse con un nombre problemático. Pero vamos a analizarlas, usando la banda de rock sureña Confederate Railroad —cuyo vocalista, Danny Shirley, ha prometido que "nunca" cambiará el nombre de la banda— como ejemplo.

El argumento: es por lo que nuestros fans nos conocen.
Si "Confederate Railroad" cambiara su nombre a "Kentucky Railroad" mañana, cualquiera que buscara su música podría encontrarla fácilmente, después de pasar 15 segundos en Google. A cualquiera que realmente le guste su música no dejaría de gustarle porque está hecha con un nombre diferente. Los que abandonen "Kentucky Railroad" lo harán porque sienten más lealtad a la palabra "Confederate" que a la banda en sí misma. ¿Acaso son el tipo de seguidores a los que quieren apelar?

Publicidad

El asesinato de George Floyd

El argumento: es sobre lo que hemos construido nuestra carrera.
No construyeron su carrera con el nombre de su banda; la construyeron con su música. Si la banda de Shirley —formada en 1987— hubiera optado por "Kentucky Railroad" en lugar de "Confederate Railroad", sus canciones serían las mismas, sus presentaciones serían las mismas y el nivel de éxito alcanzado sería el mismo. Para Shirley, pensar lo contrario sería infravalorar su propio arte.

El argumento: es a lo que nos hemos apegado emocionalmente durante años.
Es entendible, Confederate Railroad ha usado ese nombre durante 33 años; para este punto, deben identificarse enérgicamente con él. Pero hay que ponerlo de esta manera: hemos identificado la palabra "Confederate" con la esclavitud durante aproximadamente 160 años, desde el comienzo de la Guerra Civil. El término "Confederate" no evoca a la banda "Confederate Railroad" en nuestra conciencia popular; sino a la Confederación. Sin importar cuán emocionalmente apegada pueda estar la banda a este término, millones de afroamericanos están más apegados a él como un significante de un movimiento que luchó para mantener a las personas que se parecen a ellos —si no es que a sus ancestros mismos— como esclavos. En la batalla del apego emocional, un lado claramente vence al otro.

El objetivo de esto no es señalar a Confederate Railroad en particular; podríamos aplicar la misma lógica a cualquier banda con un nombre insensible y llegar a la misma conclusión. En cambio, el punto es mostrar que cuando cuando una banda cambia un nombre problemático, no está cambiando su música ni ahuyentando a sus fans, al menos no a sus verdaderos seguidores. En cambio, le está diciendo al mundo: nos preocupamos más por las vidas de las personas negras que por cómo nos llamamos.

Publicidad

Cuando una banda decide no hacerlo, está diciendo lo contrario.

Lady A y The Chicks han demostrado que cambiar un nombre que no tiene en cuenta consideraciones raciales no solo es posible; sino que es fácil. Si bien es un tema que se ha vuelto espinoso de alguna manera y ha generado tantas preguntas, en realidad solo hay una que vale la pena hacer: ¿Quién es el próximo?

*Confederate Railroad y Turbonegro no respondieron a múltiples solicitudes de comentarios de VICE. En una declaración, Slaves escribió:

"Como individuos, así como parte de un colectivo, mantenemos ciertas virtudes cerca de nuestros corazones: la honestidad y la transparencia con nuestros fans son algunas de las más importantes. Al principio del proceso de escribir y grabar el nuevo álbum To Better Days, discutimos cómo debería sonar esta nueva iteración de nuestra banda, cómo debería verse y cómo debería llamarse. Decidimos entonces que este sería nuestro último lanzamiento bajo el nombre "Slaves". El nombre "Slaves" fue concebido como referencia a la lucha de la banda con el abuso de sustancias en el pasado, a la idea de que nos volvemos esclavos de nuestras adicciones y nuestros propios demonios. Nuestro objetivo siempre ha sido abordar estos temas difíciles de frente, así como construir una comunidad y compartir historias de esperanza para que otros sepan que sus demonios internos pueden ser derrotados. Sin embargo, esta definición del nombre no hace un reconocimiento de sus connotaciones raciales. Como obstinados partidarios del movimiento BLM, no podemos seguir ligando nuestra música y nuestro mensaje positivo a una palabra asociada con tal negatividad y dolor. 'To Better Days' representará el cierre de un capítulo y el comienzo de otro para la banda. Es algo que hemos estado planeando por un tiempo y estamos emocionados de comenzar a revelar nueva música y un nuevo nombre más adelante este año. Agradecemos a nuestros fans que continúan apoyándonos y esperamos compartir esta nueva era con ustedes en el futuro".

Sigue a Drew Schwartz en Twitter.