Las cadenas de restaurantes van en picada, menos las de pizza

Es la temporada trimestral de ganancias, ese momento maravilloso cuando las compañías entregan una tarjeta de autoevaluación a los accionistas, pero actualmente los tiempos parecen difíciles en el negocio de las cadenas de comida. De las 16 cadenas de restaurantes que han reportado sus ingresos a Bloomberg el pasado miércoles, 15 de ellas reportaron descensos en las ventas o aumentos previos a esta semana. Sin embargo, existen un par de cadenas sobresalientes con éxito a pesar de lo que parece ser una recesión restaurantera; y ambos son proveedores de pizza: Domino's y Papa John's.

Las pizzas salen disparadas por la puerta en dos de las franquicias más populares de Estados Unidos: en Domino's las ventas incrementaron un 10 por ciento, mientras que en Papa John's aumentaron casi un 8 por ciento. Después de todo, ¿por qué salir a comer y encontrarte con la humanidad cuando puedes tener un círculo enorme de pan con mozzarella entregado directamente a tu puerta?

En particular Domino's ha estado imparable en años recientes, desde que su CEO describió la pizza que hacían como "carente de sabor" durante una campaña publicitaria nacional en 2010 e introdujeron pizzas nuevas y mejoradas, las ventas y las acciones de la compañía crecieron en períodos posteriores.

"Es difícil decir que nos estamos beneficiando de una supuesta 'recesión restaurantera'. Especialmente porque hemos tenido 21 trimestres consecutivos de crecimiento de ventas en las mismas tiendas nacionales (y siete años consecutivos de ventas positivas)", le dijo a MUNCHIES Tim McIntyre, Vicepresidente Ejecutivo de Comunicación, Relaciones de Inversión y Asuntos Legislativos. "Y otros alegan que nos hemos beneficiado de factores externos y no de nuestro esfuerzo durante siete años. No creo que sea el caso".

McIntyre señala algunas de las razones por las que Domino's sigue incrementando sus números: opciones para ordenar de forma digital, calidad de los alimentos ampliamente mejorada, una buena campaña publicitaria y un nuevo diseño en las tiendas. Como Bloomberg indica, ser capaz de ordenar pizza por Twitter o gritar a tu Amazon Echo que quieres pizza no puede ser algo malo —este es el tipo de cosas con la que los niños solían soñar—. Y con los drones para hacer entregas de pizza y los robots surcando los cielos y saliendo a las calles junto a un auto que también es un horno para pizzas, parece que hay más cielos despejados por delante. Incluso, si el pronóstico económico resulta ser no tan bueno, probablemente la pizza seguirá teniendo éxito.

"¿Somos resistentes a la recesión? La historia lo ha demostrado, como lo es la industria en general. La pizza es la oportunidad para ofrecer un alimento que las familias aman", McIntyre le dijo a MUNCHIES.

Y eso, puede ser verdad pase lo que pase. Un equipo de analistas de bolsa recientemente aclaró el panorama respecto a las acciones de Papa John's, pues se piensa que el malestar político y civil alrededor de las elecciones promueve que la gente ordene a domicilio en lugar de salir a comer.

En el futuro, quizá pediremos nuestras pizzas de pepperoni felizmente por Twitter, serán entregadas por un dron y las recibiremos en nuestros bunkers el día del juicio final.