El rave de vino es un estado mental

Como una persona clásica y refinada, jamás tomo vino como tomo alcohol fuerte. ¿Por qué? Porque el vino es intimidante. Siempre me siento como un fraude cuando trato de comprarlo, leo una etiqueta y veo palabras como "opulento" y "mantecoso" en la misma frase, sin tener idea que significa en lo que se refiere a la bebida alcohólica de uva. No quiero que mi bebida se sienta como una tarea asignada, sólo lo quiero en mi boca. El whisky por ejemplo es más fácil. Muchos de ellos sólo dicen, "Soy de este lugar y soy llamado después de esta persona".

Dos bebedores de vino de los Ángeles, Maxwell Leer y Adam Vourvoulis, quisieron cambiar las mentes de mequetrefes obstinados como yo. Ahora, decidieron convertir el vino en una de las bebidas más demandadas en "el club" lazando algo llamada Rave de Vino.

Sí, lo leíste bien. Un rave, pero de vino.

Sin nunca antes haber ido a ningún rave en mi vida (una decisión muy consciente), Estaba extremadamente dudosa de ir al primer Rave de Vino en Honeycut en el centro de Los Angeles a principios de semana. Después decidí echar un vistazo al sitio oficial del Rave de Vino para tener una idea más amplia de lo que me podía esperar. "El rave de vino es un estado mental. Puedes sentirte como un color y tener sensaciones de placer, como la vida". Deja de girar, Derobe. Vuélvete bioiluminicente. Siente a un extraño. Escucha. Ríe y diviértete. Rave de Vino".

Estaba segura de que iba a odiar esto.

Pero por supuesto, no importa lo estúpido que crea que puede llegar a ser algo, trato de ir con la mente abierta. Uno nunca sabe. A lo mejor sintiéndome como un color y sintiendo a un extraño es lo que me estaba perdiendo.

Llegué a Honeycut al rededor de las 11:15 PM. El evento empezó a las 11, pero me tomó tiempo darme cuenta que este lugar estaba situado en un callejón. El guardia de seguridad me preguntó por mi identificación y quería saber porqué estaba ahí. Le dije que iba a un Rave de Vino y me dijo "¿Eso es lo que sucede allá abajo?" Una buena señal.

Adentro habían dos cuartos. Uno era el cuarto para acostarte, entrada libre, luces negras y lleno de mesas para que la gente se sentara al rededor a platicar. El otro cuarto era en donde podías bailar. Glow sticks cubrían la pista de baile.

Regresé al otro cuarto y conocí a Maxwell Leer, quien me dijo que trabajaba en el evento, dando shorts de vino blanco. Me dieron una pulsera que me permitía tomar una bebida llamada "Valley Girl Rose & Tonic." Leer me explicó que todas las bebidas estaban diseñadas para brillar con la luz negra y que todas las bebidas tenían vino incorporado. También me ofreció barníz de uñas para mi bebida que brillaba en la obscuridad, lo cual rechacé amablemente.

El vino en los shorts de vino tuvo una calificación del 98% por Leer and Vourvoulis. Este es un nuevo sistema de calificación que ellos inventaron, y aunque no es oficial, Leer me aseguró que era bastante legítimo. Sabiendo que él es uno de los director de vino de Bestia, le creí completamente. Después se volvió a poner su máscara que brilla en la obscuridad otra vez y fue a la pista de baile con su bandeja de shorts llena.

Me gustó que los cócteles de vino costaran $20 dólares y como el menú lo dice "WINE SHOTZZZ 4eva", no me pareció un mal trato. Por $30 dólares, podía haber comprado una botella, una botella llena de cócktail de vino de rave. Es la botella más accesible en el mundo, yo creo.

Cerca de la media noche regresé a la pista de baile. Los asistentes de repente eran muchos más, más de 50 o 60 personas en la pista de baile. Había una mezcla interesante, algunos adultos jóvenes parados en las orillas, moviendo la cabeza de un lado a otro al ritmo de la música. Cerca del centro de la pista estaban los más jóvenes vestidos con camisas de botones y cardigans. Las mujeres con vestidos cortos o shorts muy cortos. Esto no se sentía como un rave de ninguna manera. Cuando imaginaba un rave, imaginaba gente vistiendo sombreros altos de pelo sintético y alas de hada, también imaginaba que habría música EDM, no Top 40.

El DJ fue probablemente mi parte favorita de la noche. Me gustaba notar como en el transcurso de la noche se iba poniendo cada vez más borracho. Cerca del principio de la noche, ponía canciones de rap mainstream, la música que todos querían oír. Las personas gritaban cosas como "baking soda" a la mitad de una canción que jamás había escuchado, porque nos soy tan cool. También se emocionaban mucho con otra canción sobre otra canción que tenía que ver ¿Con el martes? No sé.

Después de una hora, el DJ empezó a molestar a las personas poniendo la canción de Kid Rock "Bawitdaba." Casi todos dejaron de bailar y se vio forzado a cambiarla a la mitas y poner "California Love". De cualquier forma la gente ya no estaba tan emocionada y se vio en la necesidad de volver a poner, cinco veces más la canción de baking soda. Luego, después de una hora o más puso "Miserable". Un hombre blanco de camisa de botones gritó "Pon música gángster" puso música gángster. El DJ decidió ignorarlo y puso "Miserable" tres veces en el transcurso de media hora.

A pesar de esto, la mayoría de las personas parecía estar divirtiéndose. Muchos bailaban solos, obviamente esperando a encontrar a alguien especial. Algunos afortunados sí lo encontraron, lo cual me hizo creer en el amor otra vez. Aunque esta nos sea mi espacio, aprecio muchos que todos se la pasaran bien, bailando y tomando vino.

Alrededor de la 1:30 am, el DJ puso Third Eye Blind y la gente otra vez dejó de pasarla bien y me imaginé que esto no iba a cambiar mucho y decidí irme.

Fuí al Rave de Vino pensando que obtendría lecciones de cómo salir de fiesta con un diplomado en farmacéutica, sin embargono fue el caso. El vino estaba delicioso. Un gran plus en mi libro.

No estoy segura de que este tipo de lugares vaya a revolucionar la manera en que los jóvenes adultos perciben el vino, pero si eres una persona que de entrada le gusta el vino y te gusta bailar mientras gritan "baking soda," entonces el Rave del Vino es definitivamente para ti. Si eres una persona poco cool, que odia bailar como a mi, quédate en tu cuarto y apégate al vino de caja.