Por qué la captura del Chapo no va a frenar el tráfico de drogas a EU

Este artículo fue publicado originalmente en VICE News, nuestra plataforma de noticias.

La captura del narcotraficante más buscado del mundo a menos de seis meses desde su cinemático escape de la cárcel por un túnel probablemente hará poco para detener el tráfico de drogas a través de la frontera hacia EU. Los expertos dicen que, en realidad, es posible que contribuya a la violencia y a la inestabilidad en el lucrativo mercado de producción de drogas en México.

El presidente Enrique Peña Nieto anunció la segunda detención en su administración de Joaquín El Chapo Guzmán el viernes. Cuando se dio a conocer la noticia de su captura, la reunión de embajadores y funcionarios consulares se interrumpió para escuchar el himno nacional a forma de celebración. La fiscal general de EU, Loretta Lynch, llama la detención "una victoria" para los ciudadanos de ambos lados de la frontera.

Sin embargo, mientras que la élite política de México está eufórica —y sus abogados se preparan una batalla judicial contra una posible extradición— los analistas y críticos de la guerra contra el narco en México con el respaldo de EU señalaron que la captura de Guzmán significa poco para el mercado de drogas en las calles de EU o en los niveles de violencia en México.

Se cree que Guzmán es responsable del tráfico de la gran mayoría de los narcóticos —sobre todo mariguana, cocaína, heroína y metanfetamina— que se consume en EU, según la Administración para el Control de Drogas de EU (DEA).

En un punto, el éxito del imperio del cártel de Sinaloa colocó a Guzmán en la lista de Forbes de las personas más ricas y poderosas del mundo. Mientras tanto, el número de homicidios se disparó en el estado natal del Chapo entre 2009 y 2014, y alcanzó los 2,423 en [2010](En un momento, el éxito del imperio de la droga de Sinaloa propulsado Guzmán en la lista de Forbes de las personas más ricas y poderosas del mundo. Mientras tanto, los homicidios se dispararon en el estado natal del Chapo de Sinaloa, entre 2009 y 2014, llegando a un máximo de 2.423 en 2010, según las diferentes facciones del cártel lucharon por el control regional.) cuando las divisiones del cártel luchaban por el control regional.

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"Esto no va a cambiar absolutamente nada", dijo Russell Jones, un detective antinarcóticos retirado que trabajaba para la DEA en la década de los 80 y es miembro de la organización LEAP.

"Tan solo ve a los otros líderes del narco que hemos capturado, como Manuel Noriega, Pablo Escobar, "Freeway" Ricky Ross, etcétera. Ninguna de sus detenciones ha servido para frenar el narcotráfico", dijo Jones para VICE News.

Parece que las autoridades estadunidenses ya lo saben. En un documento interno, la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza descubrió en 2011 que no hay "ningún patrón perceptible" para mostrar que la captura o muerte de un capo aumente o reduzca las incautaciones de droga en la frontera entre EU y México. Tales incautaciones son el principal indicador que se utiliza para calcular la producción de drogas y las ganancias.

El arresto de Guzmán en la ciudad de Los Mochis se produjo en medio de un aumento en la producción de heroína en México en los últimos años, sobre todo en las regiones del país que están bajo control o la influencia del cártel de Sinaloa. Cada vez llega más heroína hecha en México a las calles de EU, lo cual empeora la crisis de adicción a los opiáceos.

La medición del volumen y las ganancias relacionadas con narcóticos ilegales es difícil. La mayoría de las cifras sobre la producción de drogas se basan en proyecciones generadas por las cargas de drogas decomisadas que, según las autoridades, representan sólo una fracción de lo que realmente pasa a través de la frontera de México y EU.

Sin embargo, los expertos coinciden en que el sistema de tráfico del cártel de Sinaloa no se vio afectado por la captura previa de Guzmán en febrero de 2014 ni por su notorio escape en julio de 2015 del penal del Altiplano.

Mientras que el Chapo estuvo en la cárcel entre 2014 y 2015, hubo pocos cambios en la organización del cártel de Sinaloa.

Ismael "El Mayo" Zambada, otro de los líderes del cártel de Sinaloa, sigue prófugo. Rafael Caro Quintero, uno de los padrinos del narcotráfico en México que fue liberado en Jalisco en 2013 después de casi 20 años de estar tras las rejas, presuntamente regresó al negocio. Caro Quintero, de 63 años de edad, ahora es fugitivo de EU y México.

"La organización del Pacífico [el cártel de Sinaloa] no se desmanteló en sí", dijo Guillermo Valdés, el jefe de la agencia de inteligencia de México durante el gobierno de Felipe Calderón, quien tomó la guerra contra el narco como su principal prioridad durante su mandato de seis años que terminó en 2012. "Tiene una dirección más colectiva y desde siempre ha demostrado ser muy estable".

Todo esto podría cambiar si trasladan a Guzmán a EU para enfrentar cargos de narcotráfico.

El escape casi caricaturesco a través de un túnel subterráneo que daba a su regadera sería mucho más difícil de lograr en una cárcel de EU. Guzmán también podría ofrecer información sobre los rivales o agentes corruptos del gobierno de ambos países, a cambio de algún tipo de indulgencia.

El gobierno de EU solicitó formalmente la extradición de Guzmán en junio de 2015, justo antes de su fuga por el túnel. Los agentes de la DEA ya habían advertido a México que Guzmán podría escapar de la prisión pero las autoridades del gobierno de Peña Nieto ignoraron la advertencia.

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Más tarde, en octubre de 2015, con Guzmán libre durante tres meses, un juez mexicano falló a favor de la petición de los abogados de Chapo para evitar una posible extradición en caso de lo capturaran una vez más. Esto indica que es probable que se produzca una batalla legal en los próximos días en el complejo sistema de justicia de México.

Un ex aliado de Guzmán que más tarde se convirtió en un acérrimo enemigo, el estadunidense Edgar "La Barbie" Valdez Villarreal, pasó cinco años en una cárcel mexicana antes de que lo trasladaran a EU en septiembre del año pasado para enfrentar cargos en una corte federal en Atlanta. La semana pasada, La Barbie cambió su declaración por cargos de narcotráfico de "inocente" a "culpable", lo que indica que llegó un acuerdo con las autoridades estadunidenses a cambio de indulgencia.

Un ex agente que está en contra de la guerra contra las drogas expresó su escepticismo con respecto a la posibilidad de que el Chapo sea extraditado rápidamente, si es que sucede, debido a la información potencial que pudiera revelar la corrupción en las agencias antidrogas.

"Es muy peligroso que vaya a juicio", dijo Stephen Downing, miembro del consejo de la organización LEAP. "Cuando empiece tanto su defensa como las negociaciones, le va a pesar a muchos funcionarios estadunidenses y mexicanos… Es un peligro para mucha gente en la DEA".

Downing es un subjefe retirado del departamento de policía de Los Ángeles que puso en marcha y dirigió los operativos antidrogas de la policía de Los Ángeles en la década de los 70.

"Empecé los operativos antidrogas en la LAPD cuando Nixon anunció la guerra contra el narcotráfico, organicé todas las unidades divisionales, establecí los sistemas de inteligencia y coordinación con las autoridades federales", dijo Downing.

El ex funcionario agregó que esta experiencia le enseñó que las detenciones hacen poco para reducir la violencia y las muerte relacionadas con el narcotráfico.

Si hay una redada en la parte sur de Los Angeles y capturan entre 15 y 20 dealers, el resultado inmediato es un aumento en la violencia y un aumento en las muertes por sobredosis", añadió. "Ese pequeño fenómeno que se da en los barrios está sucediendo a escala global."

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