Este artículo fue co-creado con Buchanan’s Two Souls.
“Mi papá me decía si las cosas no se resolvían, el tiempo las iban a resolver. Y si no se resolvían con el tiempo, era porque iban a dejar de importar”, dice Daniela Spalla cuando le preguntas cuál es el mejor consejo que le han dado en su vida. Y esa reflexión, involuntariamente, parece ser la que ha dictado su vida, o al menos su carrera musical hasta el momento.
Videos by VICE
Originaria de Córdoba, Spalla lleva varios años ya viviendo en México, un país en el que encontró lo que no conseguía en Argentina: grabar su primer álbum de música original. “Me fui de Argentina porque encontré mejores oportunidades en México. Se me abrieron puertas que hasta ese momento en Argentina no se me estaban abriendo: específicamente, grabar un disco, o tener el dinero para grabarlo”, recuerda.
Al tomar esa decisión, el espíritu de Dani se dividió: por un lado, está la parte que lucha por conseguir su sueño, y que cada día lo siente más cercano; por el otro, la nostálgica, la que extraña su país y que reconoce que el lugar donde está su casa no es donde está su hogar.
Esa ruptura, sin embargo, ha probado ser crucial para la trayectoria de la cantautora, quien actualmente reconoce estar viviendo su mejor momento. Después de debutar con ese primer álbum, Ahora vienen por nosotros, en 2014, Spalla publicó el año pasado Camas separadas, un LP que la impulsó a un nuevo nivel. En sus palabras, “el disco básicamente me acercó a mucha gente. Todas las canciones tienen un cambio respecto a mi disco anterior: conté las cosas de manera más directa, y la gente conectó”. Pero además de encontrarse con un público más grande, ese álbum transformó la manera en la que creaba canciones. “A nivel musical, [ Camas separadas] me ayudó a encontrar un sonido en mi voz, un lenguaje que pudiera decir lo que necesitaba decir, pero que la gente entienda también”.
Camas separadas es un disco que “nació en plena tormenta, y después cuando empezaba a salir el sol”, explica Dani. La tormenta, en este caso, fue el romper no sólo con su pareja del momento, sino también con su oficina de management, y en general, con las cosas que tenía estables en su vida. Esta sacudida de vida fue lo que posibilitó el momento que vive ahora: Dani acaba de dar el concierto en solitario más grande en su trayectoria, en el Teatro Metropólitan de la Ciudad de México; la cantidad de seguidores que tiene es cada vez mayor; cada vez se siente más cómoda como compositora y como intérprete; y, sobre todo, se encuentra completamente feliz. Y sabe que, al menos por cómo se han dado las cosas, todo lo anterior es producto de su decisión de dejar Argentina y atreverse a enfrentarse a un lugar completamente nuevo. “ Camas separadas lo hice porque llegué a vivir a México. Porque en México empecé a escuchar otra música, pero también empecé a escuchar mucha música de Argentina, porque empecé a extrañar, y si no, no lo hubiera hecho”.
La experiencia de vivir en México ha cambiado a Daniela poco a poco, tanto en términos personales como artísticos. “La manera de hacer canciones se está volviendo muy mexicana en mí”, dice Dani. “En México la gente no tiene miedo de mostrarse vulnerable, de mostrar sus sentimientos. Si se largan a llorar en el show, no les importa; si te quieren dar un abrazo, te lo dan. En Argentina eso es más distante… Normalmente no usaba palabras como corazón o amor, me parecían demasiado sentimentales. Pero acá la gente no tiene tantos prejuicios de los sentimientos”. De pasar de escribir canciones abiertas a la libre interpretación, Dani abrazó “la vulnerabilidad que antes me costaba mucho mostrar”. Y aunque se siente expuesta cada vez que escribe e interpreta una melodía en donde muestra lo que realmente siente a flor de piel, sabe que esa autenticidad ha sido un factor decisivo por el que más gente se sienta identificada con sus canciones: “porque les estás contando historias que a ellos también les pasan”.
Actualmente, Dani está componiendo lo que será su tercer álbum de estudio, del cual ha publicado ya al menos un par de sencillos: “Si te alejas” y “Te veo a la salida”. Aunque está trabajando de nuevo con Adán Jodorowsky, quien produjo Camas separadas, es evidente de este par de adelantos que este nuevo LP tendrá un sonido –y una temática– distinta. “ Camas separadas me gusta mucho, pero hay que evolucionar también. Me gusta evolucionar con alguien”, dice refiriéndose a Jodorowsky, quien también creció con un espíritu dividido, en su caso, entre Francia y México. “Ya tenemos una historia… Él me exige y yo le exijo”.
Superar los malos momentos y encontrarse en una buena etapa viene con sus propios retos. “Me siento estable, y existe un desafío en la estabilidad: no hay ningún fuego artificial ni ninguna tormenta que te esté empujando, entonces hay que estar más alerta para poder crecer”. Sin embargo, Dani tiene sus metas muy claras: quiere seguir evolucionando como artista y conquistar otros territorios, como Colombia, Chile, Perú y, por supuesto, la meta máxima: Argentina, país en donde sabe que el reto es mayor no sólo por ser su hogar, sino porque reconoce que existe una gran exigencia por el lado musical. “Te juzgan más… todos están en una carrera por ver quién es el más original, y resulta muy enriquecedora”.
No obstante, sabe que, como todo lo demás, el lograr el éxito que desea en su país es algo que llegará a su debido momento. Regresando a la máxima que alguna vez le expresó su papá, Dani reflexiona: “Hay que confiar en que las cosas empezarán a ocupar un lugar en la realidad cuando tengan que ocuparlo”. Mientras tanto, hay que disfrutar del camino que te lleve a ello.
Próximas fechas de Daniela Spalla:
20 de octubre: Tlaxcala, México
21 de noviembre: San Luis Potosí, México
22 de noviembre: Querétaro, México
29 de noviembre: Morelia, México
31 de noviembre: Toluca, México.
Créditos
Fotos: Alexis Gómez
Vestido: Carlos Pineda
Aretes: Daniela Millan
Botas: Ant
Stylist: Ifigenia Martínez Urdaneta