Después de haber creado Gorillaz y Tank Girl, trabajando casi 30 años como diseñador gráfico, Jamie Hewlett finalmente fue seducido por una galería para hacer su exposición debut. Su inspiración la encontró, como muchos otros antes que él, al googlear “sexo con indigentes”.
“Estaba en mi estudio hablando con alguien sobre pornografía en línea”, explica Hewlett. “Yo le dije, en tono de chiste: ‘Lo que sea que escribas, ahí va a estar’. Él no me creyó. Le dije: ‘OK, pensemos en algo… sexo con indigentes’. Lo escribió y había un sitio web sobre eso. En realidad no quería verlo, y no creo que mucha gente quiera hacerlo, pero mi punto es que todo está ahí. Nada queda a la imaginación, en absoluto. Eso no me gusta. Yo prefiero el poder de la sugestión”.
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Y así nació “The Suggestionists”, su primera exposición en una galería. La muestra reúne tres estilos diferentes de trabajo de Hewlett. Los fans de sus caricaturas reconocerán inmediatamente las imágenes “Tarot”, inspiradas en la reconstrucción mágico-realista del Tarot de Marsella original hecha por el director de cine chileno Alejandro Jodorowsky; la esposa de Hewlett, Emma de Caunes, hace el papel de “Honey” en su homenaje a la explotación sexual de los posters de películas de los 70, y “Pines”, una serie de dibujos que hizo en el sur de Francia, ofrece un contrapunto bucólico.
“Son muy diferentes en cuanto a estilo y medio, pero están conectados por la idea del poder de la sugestión”, dice Hewlett. “Después de haber tardado tanto en hacer una exposición, quería mostrar tres lados diferentes de lo que hago”. Aquí nos habla de algunas de las imágenes de la colección…
“Estos posters son mi homenaje a gente como Saul Bass, Russ Meyer y la revista Oz. Se me ocurrió hacerlo hace mucho tiempo, pero estaba un poco aprensivo con la idea de contratar una modelo y pedirle que posara para mí, así que mi esposa accedió a hacerlo. Eso significó que había una conexión instantánea con la que podíamos jugar. También significó que tenía que ser respetuoso con ella. Estas son las nuevas obras que más han desconcertado a la gente, especialmente a mis amigos. Supongo que es la cosa inglesa de sentirse incómodo con la desnudez”.
“Los títulos tenían que ser un poco cursis, porque muchos de ellos lo eran en esa época. Mi esposa es actriz y me dijo que sólo posaría si podía interpretar un personaje. Por eso creamos a Honey, una estrella erótica olvidada de los años 70 que hizo un montón de películas con títulos estúpidos, como “Doble Honey”, “Honey la Douce” y “Un sabor a Honey”. Esa fue la forma en que mi esposa se metió en el personaje, en lugar de simplemente quitarse la ropa y posar desnuda en frente mío. También nos divertimos con los créditos, que se basan en juguetes sexuales y posiciones del Kama Sutra: Ben Wa Balls y Ananga Ranga”.
“Los posters son mi homenaje al erotismo, que es un poco kitsch y cursi, pero lo recuerdo con bastante cariño. Posters como estos provocaban escándalo en la época. Hoy en día, lo que quieras está en Internet. Prefiero ese período en el que las cosas se dejaban a la imaginación. Creo que eso es mucho más sexy y excitante. La pornografía en Internet me preocupaba cuando mis hijos eran pequeños. Se encontraban con todo tipo de mierda simplemente escribiendo cosas como “cachorros” o lo que fuera, y luego aparecía una verga gigante en la pantalla. Ese tipo de cosas le da a la gente una idea equivocada sobre el sexo y el amor”.
“Le Mat –El Loco– se supone debe tener un perro tirando de los faldones de su camisa, pero en la interpretación de Jodorowsky, él habla de que a veces en lugar del perro hay un mono. Así que dibujé al mono, porque me gustan los monos. El Loco está relacionado con la Carta Número 13, que todo el mundo llama la “tarjeta de la muerte”, pero que en realidad no tiene nada que ver con la muerte. Hay muchos significados ocultos en esas cartas, te puedes encontrar en todas ellas. Quería que la gente tuviera un personaje favorito, como tener un Pokémon favorito”.
“L’Amoureaux –Los amantes– es una carta complicada porque tiene muchos significados. Hay una mano ahí que puede venir del hombre en el medio o de la mujer a su izquierda. La escena se puede interpretar de muchas maneras diferentes. Puede ser una señora ofreciéndole una prostituta al hombre. Puede ser un joven presentándole su novia a su madre. Puede ser una relación de tres de una mujer mayor, otra más joven y un hombre. Es ambiguo. Es como una prueba de Rorschach. Tomas lo que quieras”.
“Los pinos cuentan historias. Cuando los estaba dibujando le mostraba a la gente los pequeños personajes que podía ver en ellos y las historias que estaban interpretando. La gente a la que le mostraba eso señalaba a su vez otras cosas que no había visto. Empecé a darme cuenta de que todo el mundo podía ver algo distinto en ellos, y eso me entusiasmó. Se ajusta a la idea de la sugestión, al igual que el tarot y los posters de películas también hablan de sugestión. Me gusta la idea de las personas usando su imaginación y tratando de averiguar lo que pueden ver en las imágenes”.
“Hay mucho sexo en los árboles. Hice una entrevista con un programa alemán que pasan en países árabes, y había ciertas imágenes de árboles frente a los que no grababan. Les pregunté por qué y me dijeron: “Mira, eso obviamente es un pene” y “Hay un seno grande en el lado de ese árbol”. Les dije, “Yo no vi eso, pero ustedes lo vieron. Esa es su mente sucia”. Hay mucho ahí que no noté al principio”.
“Dibujé los pinos en Cap Ferret, una península en el suroeste de Francia. Todos fueron dibujados a las 8:00 p.m. cuando el sol estaba muy bajo y estaban cubiertos por sombras. Fue una obsesión que tuve por tres meses. Simplemente no podía dejar de dibujar los putos pinos. Llegué a un punto en el que yo soñaba con la textura de la corteza, y ahí dejé de hacerlo. No voy a empezar ahora a dibujar árboles de roble ni nada así. Creo que por ahora ya terminé con los árboles”.