Entre las sonrisas y el vómito

En cada edición de su revista, VICE realiza una búsqueda de los lanzamientos musicales más relevantes de la temporada. Para calificarlos solo hay dos notas: cara feliz o cara de vómito. Estas son las opiniones de nuestros expertos sobre los sonidos que andan retumbando en Colombia y el mundo. 

ANA TIJOUX

Videos by VICE

Vengo

Nacional Records

 Ana Tijoux es la verdadera sofisticación de las calles, un fenómeno que va más allá de la comercialización no-comercial de propuestas tipo Calle 13, logrando integrar el éxito en la industria musical con versos sólidos y mensajes consistentes que la mantienen fiel a sí misma y, sobre todo, independiente y digna. En Vengo, los samples son reemplazados por una orquesta donde cobres perfectamente ensamblados con flautas andinas y charango permiten observar una nueva dimensión de la artista francochilena, una artista más cruda y honesta que nos habla de identidad con historias de la cotidianidad real latinoamericana presentadas a corazón abierto. La Tijoux es una artista actual, se sale del cliché del hip hop y hasta de la world music para fundir instantes que se pasean entre el flamenco, el jazz, el funk, la música andina y el hip hop de los 90. Un instante en Bolivia, al siguiente en Palestina, dulce y a la vez descarnada, siempre celebrando la fuerza de estar vivos a pesar de las dificultades.

ERIKA STEER

  
DISCO DEL MES

SON PALENQUE

Afro-colombian Sound Modernizers

Vampisoul – Palenque Records

 Más que una antología, este disco es la historia de un combo original de San Basilio de Palenque que, a finales de los 70 y principios de los 80, se pregunta de dónde viene. Es una expedición musical que conecta sus sonidos de raíz con los rumores modernos del continente negro y de su diáspora en el Caribe, para dar con una mezcla sonora moderna e hipersabrosa, pero sobre todo con una respuesta efectiva a la zozobra sobre su origen. Sintetizado con acierto en esta colección de grandes éxitos, el legado de nombres como Justo Valdez, Enrique Tejedor y Luciano Torres es también la leyenda de unos amigos que, desde el Caribe colombiano y desde hace más de 30 años, celebran el espíritu del África universal. Una resistencia sonora poderosísima que, en esta antología de Lucas Silva, en coproducción con el sello Vampisoul de España, alcanza un pico memorable, recomendado sobre todo para antropólogos bailarines.

NICOLÁS VALLEJO-CANO

MADLIB/FREDDIE GIBBS

Piñata

Madlib Invazion

 En el momento que supe que existía este disco tuve que bajarlo y escucharlo. Fue de esos discos en los que ambas partes de la ecuación tenían sentido, pero no sabía qué esperar. Desde los Beat Konductas hasta el recién estrenado Rock Konducta, pasando por todos los Medicine Shows, lo que ha hecho Madlib es historia de hip hop. Freddie Gibbs no tiene esa historia pero ha demostrado tener un estilo que lo ha hecho colaborar en más de un disco relevante en los últimos años. Piñata suena a de todo, como su nombre lo dice, pero tiene sentido. Las letras de Gibbs mantienen su estilo de “mantenerlo real”, se alejan del gangsta y son más reflexivas. Madlib pone bases de soul y de R&B y sintetizadores y Piñata funciona. Gibbs pone un flow que recuerda al G-Funk y Piñata funciona. Si vas a escuchar un solo track de este álbum, “Shitsville” es tu mejor opción.

MEMOBYTES

HERENCIA DE TIMBIQUÍ

This Is Gozar

Independiente

 Después de ganarse la Gaviota de Plata durante la pasada edición de Viña del Mar, esta era la oportunidad perfecta para que la briosa de la marimba diera, como dicen, “el siguiente paso”; sin embargo, si bien por momentos el disco logra capturar el espíritu “arrecho” de la banda, esa furia incontenible del Pacífico concentrada en canciones poderosas que reviven muertos (“Amanecé”), el afán por lograr un sonido comercial evidenciado en boleros de hotel (“Sabrás”) y canciones como la que le dan título al disco, que parece un himno de Juegos Panamericanos, ni siquiera de Mundial, opaca sus momentos más brillantes, como esa champeta palenquera llamada “Kelé Kandá” y “Tormenta”, que sí es una balada marimbera de sus clásicas. ¿No es hora ya de que trabajen con un productor experimentado que les pueda dar mayor consistencia y dirección a sus canciones? Siguiente nivel es siguiente nivel, ¿no?

NICOLÁS VALLEJO-CANO

  MEJOR PORTADA

IBIBIO          

Sound Machine

Soundway

 No hay una mala canción en este disco. Y es que ese viraje entre lo contemporáneo y los ecos de los 70 y 80, esa voz dulcísima en un idioma desconocido y esa fusión de electro vintage, disco y varios matices de música africana, resulta en algo definitivamente sabroso. El corte “Let’s Dance”, en particular, cuenta con un ritmo explosivo, sintetizadores sólidos y voces excéntricas y divertidas. Los saxos, trompetas y cornos adicionales también son un gran toque. Ibibio es una banda radicada en Reino Unido liderada por la vocalista nigeriana Eno Williams. La variedad de elementos musicales que Sound Machine reúne, el hecho de que todo funcione y la alegría que transmite es impresionante, sobre todo para ser un álbum debut. Lo único malo es que es muy cortico. Soundway la sigue rompiendo.

LAURA MATALLANA

SCHOOLBOY Q

Oxymoron

Interscope Records

 Después del discazo Habits & Contradictions de hace dos años, las expectativas para el primer disco de Schoolboy Q en las grandes ligas eran altas. Desde que abre con “Gangsta” se nota claramente que estamos entrando a un disco sumamente ambicioso, una introducción envolvente y memorable. El trabajo no tiene una sola canción de relleno y comprueba, una vez más, que estamos ante una nueva generación de hip hop que no sabe fallar y que, además, sus mejores exponentes colaboran entre ellos, como en este caso los hacen Kendrick Lamar y Tyler The Creator. Ah… y como si fuera poco, también tiene presencia el Wu-Tang con Raekwon en el tema “Blind Threats”. ¿Que más puedes pedir?

RICARDO AVENDAÑO

TYCHO

Awake

Ghostly International

 Una vuelta por el universo de Tycho siempre resulta en un paseo visual por paisajes inconclusos de fantasía. En Awake, Scott Hansen transita entre terrenos fríos y cálidos, condensando un downtempo plagado de sutilezas en composiciones que bien podrían ser colores. Esto no resulta extraño ya que sus antecedentes se encuentran en el diseño visual. Es la guitarra la que quía esta expedición que, a pesar de contar con una meticulosa producción, no logra cerrarse, a falta de un eje que articule los ocho cortes que la componen. Aún así, existen momentos sublimes con “Dye”, “Spectre” hace inevitablemente mover los pies y “See” es una de esas piezas que uno desearía que fueran infinitas. Para oír con audífonos, porque es música para escuchar de cerca.

ERIKA STEER

                                                      

TIMBER TIMBRE    

Hot Dreams 

Arts & Crafts           

 A pesar de que me deja queriendo más, el último disco de Timber Timbre cuenta con temas inmejorables. Sus baladas profundas con influencias vintage, folk, R&B y rockabilly se vuelcan hacia atrás en el tiempo, el brillo de la voz al estilo de los 50, la forma en la que están grabadas las guitarras, los acordes sumándose lentamente, todo tan clásico. Sin embargo, este disco no es un simple ejercicio de nostalgia. Las canciones, llenas de misterio y arreglos instrumentales desconcertantes, se sienten totalmente innovadoras, como un fetiche retorcido de Lynch. El rol más importante en Timber Timbre lo cumple el sonido profundo de los teclados, que se alejan del pop proponiendo un viaje emocional diferente, paisajes sonoros depresivos pero hermosos. Un álbum inteligente y seductor, lo suficientemente extraño para atraparme.

LAURA MATALLANA

BARETO

Cumbia

Polen Records

 Originalmente lanzado hace seis años en su país natal, en este disco, los principales exponentes del movimiento neocumbiero peruano (aunque pensándolo bien, de repente los Dengue Dengue Dengue ya los destronaron) les hacen un homenaje a los maestros de la chicha, al reunir en una sola antología algunos covers memorables del género más psicodélico que se haya grabado alguna vez en el continente, desde clásicos de Los Mirlos hasta algunos de Juaneco y Su Combo. Aunque en su momento quizás pudo haber sido innovador, la propagación de la nostalgia chichera durante los años siguientes (en gran medida gracias a los famosos compilados de Barbés Records) y su consecuente influencia sobre la nueva cumbia, hacen de esta reedición un fenómeno algo anacrónico. Y no solo porque no captura el espíritu actual de la banda, sino porque, en esta misma línea, sus versiones de ascensor medio Melodía Estéreo, si bien no son para nada malogradas, de repente se resuenan medio adultas en un panorama actual dictado por el veneno y la experimentación. Como disco funciona. Como lanzamiento en el 2014, quién sabe. Igual, merece la difusión.

HANS SOLO

TODD TERJE

It’s Album Time

Olsen Records

 El primer álbum de estudio del productor y DJ resulta en la crónica de un viajero que, ubicado en algún paraje tropical, trae consigo sonidos de los 70 y 80 y los revitaliza para hacerlos actuales. Es un trabajo que pretende alcanzar dimensiones épicas pero que, en su ambición, abusa de la mezcla entre lo retro y lo contemporáneo y termina sumergido en la saturación. Extraño, pues Terje se ha hecho famoso por su meticulosa producción de remezclas que se han convertido en éxitos de pistas de baile. En todo caso, esta vez, el noruego atesta el ambiente de psicodelia haciéndolo todo ininteligible, una verdadera amalgama de bullicio en donde uno se queda preguntando dónde está el límite entre lo uno y lo otro.

ERIKA STEER

EL REMOLÓN

Selva

ZZK Records

 Siempre que oigo el trabajo de Andrés Schteingart, un cumbiero de avanzada que de día atiende pacientes psiquiátricos, me pregunto qué tanta influencia tendrán sus sesiones terapéuticas en su sonido. Y no, no es un chiste: solo hay que ver las imágenes que dibuja en sus canciones, y sobre todo en esta nueva colección, donde su estilo de producción llega a su máximo. Distorsionadas, son fantasías animadas que tienen tanto de alucinación esquizoide como de delirio místico, tanto de ayahuasca como de drogadicción. Aunque un poco larguito y en algunos pasajes bien cercano al sonido de Cero 39, en este trabajo (que cuenta con colaboraciones con personajes como Lido Pimienta, Miss Bolivia y Ali Gua Gua de las Queers), el gran pibe cosmo argentino logra evocar universos necesariamente retorcidos. En sus manos, el kitsch latinoamericano es pura ciencia ficción. ¡Aguante Remo!

NICOLÁS VALLEJO-CANO

MAC DE MARCO   

Salad Days  

Captured Tracks    

 Ese canadiense buena onda que todos quieren y que con su anterior álbum, 2, se convirtió en una gran figura del jangle pop, nos trae este otro que no es más que una secuela con menos hits. Siento que lo estoy disfrutando solo porque suena exactamente igual a como ha sonado todo lo suyo. Y no me malentiendan, pues eso es quizás lo que lo hace tan encantador. Aunque el hombre mantiene su ambiente suave y gentil característico, no conecta muy bien con la onda depre de las letras. Pero de nuevo, es un buen trabajo, “Johnny’s Odyssey” tiene un final perfecto y los sintes al comienzo de “Salad Days” son fantásticos. Yo solo quería escuchar 2 de nuevo, pero no quería escuchar 2 de nuevo. ¿Me entienden?

LAURA MATALLANA       

AZTEC CAMERA

High Land, Hard Rain (Reissue)

Domino

 Hay pocas cosas que gritan “aquí hay un disco de culto, clásico, que no escuchaste”, como esta reedición que trae el sello de Domino en la parte posterior de la funda. Los que conocemos High Land, Hard Rain lo hemos escuchado por años y conocemos hasta el más mínimo detalle de las letras, los arreglos o la épica producción de “We Could Send Letters”. Ponemos “Oblivious” en cada fiesta que podemos esperando que algún asistente voltee sorprendido a preguntar qué es lo que suena. Somos los que nos emocionamos por las cuatro versiones de “Walk Out to Winter” en el disco de rarezas. Y esa ridículamente emocionante versión de “Queen’s Tattoo”. Pero, ¿y los que nunca han escuchado el disco? Como se diría en inglés: “you’re in for a treat”. Roddy Frame, a sus 18 años, hizo lo que muchas bandas y artistas buscan durante toda su carrera. Esta edición es la oportunidad perfecta para volver a comprar un disco que amas… o descubrirlo por primera vez.

RICARDO AVENDAÑO


 

LIARS

Mess

Mute

 El lugar común para hablar de Liars tiene que ver con algo así como la imposibilidad de encasillarlos y lo impredecible de sus cambios estilísticos. Lo cierto es que, por lo menos desde la reducción (genial) de sonido que realizaron en Drum’s Not Dead, cada uno de sus discos siguientes ha sido el resultado de reinterpretar elementos de su trabajo anterior siguiendo criterios nuevos y agregando matices distintos. Por ejemplo, la nueva reducción que hicieron en WIXIW, con la que dejaron nada más que el esqueleto de sus canciones y sobre él un tejido muscular, fibroso y liviano hecho de sintes, les sirvió de base para llegar a esto: uno de sus discos más atascados desde el Liars de 2007. Ahora ese atasque es electrónico. Lo único que no cambia es la larga lista de momentos guat da foc, como el órgano Hammond a mitad de “I’m No Gold”. Habrá quien haga las conexiones con el trance, goth e industrial que quieran, pero los métodos de Liars no tienen ni un poquito que ver con las recetas de género y, como siempre pasa con ellos, hay una sensación constante de irrealidad que los hace parecidos exclusivamente a Liars, aunque nunca sean los mismos.

ATAHUALPA ESPINOSA


 

KID MACHINE

First Contact

Cyber Dance

 No es un niño ni tampoco es una máquina, pero en su propia fantasía retorcida, Mark Wilkinson es un cazador estelar de capa y espada que lucha contra aliens y busca una compañera de aventuras que esté bien buena. La realidad, por supuesto, es que es un man de Manchester con un par de teclados y una idea brillante: producir el tipo de sonido de sintetizadores sigilosamente palpitantes que obligarán a Michael Mann a, por lo menos, dirigir su primera película de ciencia ficción sobre, no sé, un cazador estelar de capa y espada que lucha contra aliens. Este es un disco con una energía ardiente y rolas lentas exprimidas con emociones absurdas. Afrontémoslo: si has escuchado una canción de Kid Machine, las has escuchado todas, y aún así no puedes parar de volver por más, una y otra vez.

THEYDON BOIS

  PEOR PORTADA

SKRILLEX    

Recess          

OWSLA        

 Al mejor estilo de Beyoncé, este muchachito, que ha generado amores y odios entre los seguidores de la escena dubstep, lanzó su primer LP sin avisarle a nadie, ahorrándose la platica del publicista. Con esta portada tan horrible, el nuevo disco del mayor representante del “brostep” tiene sin embargo una virtud: su versatilidad. Colaborando con un espectro enorme de artistas y explorando distintos efectos y estilos de la electrónica se alejó de lo que hasta ahora había sido su zona de confort, el típico sonido estruendoso y pesado de sus secuencias, presentando once cortes inconexos pero variaditos, para todos los gustos… aunque difícilmente para el nuestro. Le daríamos la carita feliz por “Doompy Poomp”, ya que no habíamos escuchado una canción tan extraña y caricaturesca desde que Pogo sampleó recortes de Alicia en el país de las maravillas en 2008. Pero no le alcanza.

LAURA MATALLANA                  

MITÚ

Balnear

Polen Records

 Después de un primer golpe con Potro (2012), que hizo las veces de presentación del proyecto, Julián Salazar y Lamparita volvieron al estudio para un round dos. Está vez mucho menos espontáneo y visceral, este segundo disco presenta un concepto más amplio del proyecto, que ya no es solo furioso techno palenquero sino también una especie de downtempo caribe. Y es que aunque los tracks heavies e implacables siguen siendo protagonistas, son las piezas más lentas, cadenciosas e introspectivas como “Atolón”, “Solitario”, “Lada” (en la que canta Lamparita con una voz preciosa y príistina) y “Yamina” (en la que participan en las voces varias comadres de San Basilio de Palenque) las que más conmueven. Sirviéndose de la fórmula de sintetizadores análogos y tambores de cuero para modelar selvas y playas artificiales habitadas por animales luminosos, Mitú sigue dibujando un universo mágico que, sin duda, adquiere cada vez mayor liderazgo dentro de la nueva ola de música colombiana en el mundo. En este camino, sin ninguna duda, Balnear avanza en la apertura del portal de nuestro futuro sonoro.

NICOLÁS VALLEJO-CANO

CIBO MATTO         

Hotel Valentine

Chimera                                                                                                               

 Llamarse Comida Loca habla mucho de lo que será el sonido de una banda, de veras, y escuchar este nuevo disco es como tragarseun unicornio vivo. Como una historia sobrenatural, Hotel Valentine desafía al oyente a reflexionar sobre la vida, la muerte y la nada. Y puede que la historia de un fantasma que vive en un hotel te inspire alegría o terror, eso depende de ti, pero definitivamente te va a inspirar algo. Esperar catorce años por un nuevo disco de este dúo de japonesas avant-garde no fue fácil, pero por fin tenemos en nuestras manos este pedacito de la historia del pop alternativo que nadie debería perderse. “Déjà vu” se lleva todos los aplausos, incluso con ese rap noventero incrustado a mitad de la canción.

LAURA MATALLANA                                                                 

BONG

Stoner Rock

Ritual Productions

 Recientemente, en algún momento alrededor de la grabación número 472 de un “ritual” en vivo, lanzado en una edición limitada de 23 portavasos, Bong dejaronó de ser bastante buenos grabando y empezaronó a ser jodidamente increíbles. Lo suyo todavía es el drone metal psicodélico improvisado, pero uno siente que empezaron a usar mejores estudios —o empezaron a usar estudios de verdad— y ahora pasan tanto tiempo ajustando botones como asegurándose de que el atomizador esté lleno de polen de alta calidad. Ahora tienen una guitarra distorsionada y el efecto sitar tan absolutamente lisérgico que, si quisieran, podrían simplemente lanzar un álbum de dos canciones de 35 minutos con un acorde que suena una y otra vez. Que es lo que por supuesto han hecho. Putamente bueno.

SMOKEY BACON

PERFECT PUSSY

Say Yes to Drugs

Captured Tracks

 Este año se está convirtiendo en un motín de vaginas. Artículos sobre ablaciones, poderes hormonales producidos clitóricamente, el análisis de obras según la biología de sus creadores, en fin… todo lo cual significa un buen momento para ser esta banda, de verdad. Por lo que sería realmente decepcionante si apestara. Pero no, no apesta. Para nada. Perfect Pussy por ahora significa una cacofonía delirante de arte, punk y noise melódico, una construcción instrumental cavernosa construida sobre el siseo de una cinta en movimiento. Y funciona.

DUCHESS O’MALLEY

BEHEMOTH

The Satanist

Metal Blade

 Puedo aguantarme esto. Si vas a tocar death ennegrecido con solos de guitarra estratosféricos y pedales double kick, más vale que seas de Gdan’sk, y lo mejor es que tengas un vocalista que le haya pateado el culo a la leucemia y se vea como Nick Zedd. Además, estos manes han estado en la escena por 23 años y según nuestra chica de mercadeo, eso es más tiempo que tu culo lleno de granos, así que muestra un poco de respeto, preadolescente.

KALI MÍO

AGAINST ME!

Transgender Dysphoria Blues

Total Treble Music

 En 2007, Against Me! lanzó su disco más exitoso hasta la fecha: New. En el último track de este disco, “The Ocean”, Tom Gabel decía: “If I could have chosen, I would have been born a woman. My mother once told me she would have named me Laura”. En 2012, Tom Gabel se convirtió en Laura Jane Grace. El líder de una banda punk saliendo del clóset, por fin, como transgénero. ¿Qué hay más punk que eso? Dos años después, llega Transgender Dysphoria Blues, que refleja esta transición en la vida de Laura Jane Grace por medio de diez canciones en 28 poderosos minutos. El disco empieza con la canción que le da su nombre, en forma de declaración, y aunque las primeras dos parezcan lo más amigable que ha hecho la banda, poco a poco el disco sube de tono y fuerza. Y cuando menos te das cuenta, ya lo escuchaste tres veces seguidas.

RICARDO AVENDAÑO

AJ DÁVILA

Terror/Amor

Nacional Records

 Después de una larga espera, por fin llegó el LP debut de AJ Dávila, un discazo que ha superado todas las expectativas vertidas meses antes. El bajista y líder de Dávila 666 se dio a la labor de reclutar un arsenal de artistas de su admiración, dando como resultado un trabajo imprescindible gracias a la naturalidad en la que las colaboraciones se desenvuelven y la predominante ambición en su esqueleto. Nombres como los de Alex Anwandter o Juan Cirerol podrían parecer fuera de lugar dentro del espectro de AJ, pero la pureza de su estética se halla naturalmente balanceada con el universo garage-punkero de estas composiciones. Es de resaltar la manera en que AJ acomodó los tracks del álbum. Optó por abrir la primera mitad con la mayoría de los hits que ya conocíamos, para dejar en la segunda el nuevo material. Es aquí donde Terror/Amor resplandece inclusive más. Los featurings con Juanita Calamidad (“Espina dorsal”) y Lola Pistola (“Es verano ya”) son otro nivel. AJ también sabe aprovechar la seductora voz de Selma Oxor al máximo, haciendo uso de ella en tres de las canciones más peligrosas. Sin embargo, las canciones que se toca él solo (“Salvajes”, “Nena Botella”, “Hey”) prueban que el bebé es tremendo por sí mismo. Terror/Amor es imperdible, adictivo y, en realidad, bastante hermoso.

ENRIQUE COYOTZI

CLOUD NOTHINGS

Here and Nowhere Else

Carpark

 Hoy en día, si le preguntas a la gente qué es el rock, seguro te contestarán una sarta de estereotipos y bandas viejas que automáticamente te darán jartera. Las guitarras distorsionadas y baterías desenfrenadas que alguna vez te hicieron mover con locura a través de palabras que necesitas oír se han convertido en algo que sabe rancio. Pocos hoy pueden sonar inspiradores, sinceros y con huevas. Cloud Nothings son de los que pueden lograrlo. Muchas de sus canciones traen la onda de las de Grant Hart con Hüsker Dü, sumándole un sentimiento de peligro constante; es decir, rock memorable con desperfectos y un poco de crudeza en la producción. “Psychic Trauma” te sitúa dentro de la duda en ti mismo y la búsqueda de algo mejor, mientras que “No Thoughts” remite a un momento ambivalente remarcado por los gritos del vocal y los riffs insistentes. El disco termina como campeón con “I’m Not A Part Of Me”, un tema que se escucha como un clásico desde la primera vez que lo pones. Los Cloud Nothings traen tres acordes y la verdad, es cuestión del que escucha saber si quiere escucharlos para siempre.

MARCOS HASSAN

JORGE DREXLER

Bailar en la cueva

Warner Music

 En su nueva producción, Drexler demuestra que sigue siendo una figura genuina a pesar de presentar un trabajo donde la característica es la heterogeneidad. El cantautor se permite más experimentación creando collages de nuevas sonoridades como samba, el sonido lejano de la ranchera y música colombiana. Drexler encontró en Bogotá el ambiente para desarrollar la base de este trabajo. De la mano de Mario Galeano (Frente Cumbiero, Ondatrópica, Los Pirañas) y de un combo diverso de músicos en el que también participaron Eblis Álvarez (Meridian Brothers, Los Pirañas) y Julián Salazar (Mitú, Bomba Estéreo), el músico mezcló sin prejuicios electrónica y raíz, resultando en menos acordes y letra pero en una mayor base rítmica dirigida al cuerpo. Resaltan colaboraciones maravillosas con Li Saumet en el corte homónimo al álbum, Ana Tijoux en “Universos paralelos” y el mítico Caetano Veloso en “Bolivia”. Hasta se permitió un homenaje al fallecido maestro Simón Díaz con “La luna de Rasquí”. Un disco sobrado en eclecticismo, memorias y caminos.

ERIKA STEER

THE WAR ON DRUGS

Lost in the Dream

Secretly Canadian

 A pesar de lo que surgiere el nombre de esta banda, no se trata de otra versión trastocada sobre cómo el Norte ve al Sur. TWOD, por el contrario, es un halo de tranquilidad en tiempos de música desechable. Cuando creíamos que el romance entre una voz arrastrada y una guitarra hacía parte ya de una leyenda lejana, aparece esta nueva producción para confirmarnos lo contrario. El desarrollo de la fórmula química de folk-rock que tiende a shoegaze ha dado sus frutos, desde Dylan hasta Destroyer, pasando, por supuesto, por Young, pero esta vez, se nos presenta una dimensión personal con apellido Granduciel, quien nos entrega el que sin duda será uno de los álbumes sobresalientes de 2014. Escuchar en soledad.

ERIKA STEER

FUTURE ISLANDS

Singles

4AD

 Al parecer, cada paso de la receta se siguió al pie de la letra para contar una historia llamada “Future Islands go pop”: desde su salto a una disquera relativamente grande, un público que creció con tenacidad durante los últimos años, las declaraciones de Samuel Herring acerca del salto en visibilidad que pretenden dar con Singles y, por supuesto, las canciones más directas y estructuralmente convencionales que han grabado. Y digo que esa aparenta ser la receta, salvo por el detalle de que los Future Islands ya se andaban revolcando en el pop puro y duro y chocolatoso, por lo menos desde On the water. Es decir que aquí la historia es que se volvieron POP, con mayúsculas, en 3D y neón (aunque, claro, guardando las debidas proporciones, nada más hace falta verles la cara de geeks para saber que no son Belinda). Lo importante es que les sienta como Rivotril al insomne. Es decir, muy bien.

ATAHUALPA ESPINOSA

SHAKIRA

Shakira

RCA

 En su disco homónimo, la barranquillera se sirve de todas las fórmulas posibles del pop más baratito para ver si le sigue pegando al perro y, quizás, se puede comprar otro terruñito en las Bahamas. Arranca con un EDM de estadio (“Dare”), canta con Rihanna (“Can’t Remember to Forget You”), hace un rocksito teenager al estilo Alanis, como en sus viejos tiempos pero con una producción tipo Miami (“Spotlight”), ¡y hasta un country (“Medicine”)! Y todo en el inglés más chapuceado y olvidándose por completo de las caderas que alguna vez se la pusieron dura al mundo entero. El momento épico llega en la balada “Empire”, donde gime varias veces en esa voz orgásmica que le nace desde el centro de la epiglotis la sentencia “And the stars make love to the universe”. Y las estrellas le hacen el amor al universo, ¿eh?

KALI MÍO

  PEOR DISCO

JUANES

Loco de amor

Universal

 Juan Esteban Artistizábal pasará a la historia como un paisa muy querido por el pueblo colombiano que, luego de renunciar al heavy metal, en algún momento hizo canciones hasta decentes en su afán por convertirse en la estrella de pop latino más brillante del firmamento universal (se me viene a la cabeza “Fotografía” con Nelly Furtado). Pero, sin duda, también quedará inmortalizado como el artista más ingenuo de toda la historia de la música grabada. Después del rotundo fracaso de su anterior disco, P.A.R.C.E (2010), en este trabajo el hombre sí es que no le pegó a nada. Musicalmente, se trata de un pastiche de baladas rock sin carácter, a veces medio Enrique Iglesias, coronado por un ejercicio lírico tan cursi que cae en todos los lugares comunes del imaginario romántico: lunas, corazones, flores, noches, sueños… un almanaque muy feíto, en todo caso, que al paisa además le dio por cantar como si supiera cantar. El momento cúspide del disco llegó con su primer sencillo “La luz”, una especie de guasca 3ball en la que, definitivamente, Juanes demuestra que está en la más completa obscuridad. ¿Problemas de identidad, camarada?

JAIDER VILLA